“Sí o no” / Editorial
Este domingo 16 de noviembre, los ecuatorianos volvemos a las urnas para tomar una decisión trascendental. Más allá del resultado, el país enfrenta un momento que definirá su rumbo político e institucional en los próximos años.
Si la ciudadanía opta por el sí en la pregunta de la Consulta Popular y se abre el camino hacia una nueva Constitución, el Ecuador ingresará en un proceso de al menos dos años de debates, propuestas y tensiones inevitables. Reformular la carta magna es una tarea compleja, pero también una oportunidad para replantear las bases de la gobernabilidad, la creación de empleo y el desarrollo económico. El desafío será mantener la serenidad y la claridad frente a un proceso largo y decisivo.
Si, en cambio, prevalece el no, el mensaje será un llamado al Gobierno para corregir el rumbo, priorizar las urgencias que siguen sin respuesta —salud, medicinas, educación, vialidad, seguridad— y presentar reformas constitucionales ajustadas a los resultados del referéndum. Será una invitación a escuchar y a rectificar.
En cualquiera de los escenarios, el desafío para el presidente Daniel Noboa es el mismo: gobernar con visión de estadista, pensando en la totalidad del país. La lucha contra el crimen organizado debe seguir siendo una prioridad ineludible, pero sin descuidar las necesidades básicas que aún esperan atención. Este domingo no solo elegimos entre “sí” o “no”; elegimos el futuro del país que queremos construir. (O)
