Temporada soñada para Macará

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Jorge Salazar, miembro el directorio de Macará, sostuvo que la temporada 2020 fue soñada en lo deportivo y administrativo. (Foto El Heraldo)


Durante la temporada 2019 de la Liga Pro el ídolo ambateño Macará estuvo a un paso de disputar la final del torneo llegando hasta la semifinal, siendo el mejor equipo en la fase regular. Jorge Salazar, directivo, analizó el año en lo deportivo como en lo administrativo.

Señaló que no hay duda que fue una temporada soñada que por cosas del fútbol no se logró el objetivo de jugar la final y lograr el campeonato, pero el trabajo de la dirigencia ha ido sobre la marcha y no se ha detenido en la conformación de la plantilla de jugadores para la temporada 2020, que inició con la ratificación de todo el cuerpo técnico encabezado por el profesor Paúl Vélez.

Lamentó que ciertas decisiones arbitrales sumadas a la falta de dos jugadores en los partidos de semifinal influenció para no cumplir los objetivos. Nos faltó banca para afrontar estos partidos finales, declaró.

En lo administrativo también fue un año soñado con la inauguración de la Residencia Deportiva en La Providencia, así como del bus propio para el traslado de la plantilla de jugadores.  Económicamente el equipo quedó saneado sin déficit económico, añadió.

El presupuesto que manejó el equipo en la temporada 2019 acorde a lo permitido por la Liga Pro superó los 4 millones de dólares. Un millón provino de los derechos de TV, un millón por tema de marketing y publicidad, 500.000 mil dólares por concepto de taquillas y lo restante con el porcentaje de la venta del jugador John Jairo Cifuente al fútbol de Egipto. Michael Estrada al fútbol mexicano y recursos propios del club, reveló.

A este valor se le deben sumar lo que costó la Residencia Deportiva conjuntamente con el bus que sobrepaso el millón de dólares, que fue financiada con un monto inicial de 120.000 dólares de la Conmebol por medio de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) para el desarrollo deportivo. Lo restante fue financiado con recursos de la participación en el torneo internacional del equipo, auspiciantes y apoyo de la empresa privada.

Salazar señaló que el arregló económico como premios para los jugadores y cuerpo técnico estuvo establecido a inicios de la temporada, pero no se imaginaron de la buena campaña que iba a ser el equipo sobre todo en la fase regular, donde se entregó premios por partido ganado y por permanecer en el primer y segundo lugar de la tabla de posiciones. El premio fue de 500 dólares por partido ganado y por estar en los primeros lugares 700 dólares. Por llegar a la final existía un premio global cercano a los dos millones de dólares.

Finalmente, informó que para la temporada 2020 el presupuesto del cuadro ambateño variará en +/- 10 por ciento. No es lo mismo armar un equipo para la fase dos de la Copa Libertadores que para la fase de grupos por los recursos que se perciben, todos los que hacemos Macará se ajustan al presupuesto que tenemos para al final del año no tener inconvenientes, finalizó Salazar. (D)P


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