LIDERESAS INDÍGENAS / Mirian Delgado Palma
“Yo he viajado y he caminado por todos los lugares, pero jamás he negociado con la sangre de mis hermanos.” (Tránsito Amaguaña)
El Ecuador cuenta con valiosas lideresas indígenas, que figuran en las páginas de la historia como incansables luchadoras por el respeto a su etnia y las necesidades de sus pueblos y gracias a sus ejecutorias han logrado de alguna manera reivindicarse a través del reconocimiento de sus justos e inalienables derechos que como seres humanos libres les asiste.
Durante las luchas han demostrado en sus respectivos pueblos un irrestricto sentido de solidaridad, trabajo comunitario, fortaleza y decisión para asumir los roles de verdaderas lideresas gracias al seguimiento y apoyo de sus respectivas comunidades. Las luchas resultaron ser muy espinosas debido a que en su mayoría fueron personas analfabetas.
El arduo y cruel trabajo que desempeñaban y las humillaciones de que fueron objeto, constituyeron las principales motivaciones para que reaccionaran y buscaran nuevos caminos en busca de una vida digna. Su fortaleza, tesón y rebeldía hicieron que las mujeres alzaran su voz como signo de protesta a tantos años de esclavitud, vejámenes y desconocimiento de su condición humana.
Una de estas lideresas que pese a sus limitaciones logró varias conquistas para su gente a pesar de ser pobre, analfabeta y vivir explotada y sometida a todo tipo de abusos e injusticias, fue la figura de la inolvidable “Dolores Cacuango”. Una indígena autodidacta que aprendió a leer y escribir en español. Pronto tomó conciencia de la situación angustiosa de los pueblos indígenas y de los trabajadores del campo. Dolores Cacuango decidió apoyarlos y encabezó una marcha con más de 10.000 indígenas de Cayambe hasta Quito para mostrar la fuerza del movimiento indígena.
Esta valerosa mujer indígena que figuró en el siglo pasado, consiguió crear conciencia sobre el racismo y luchar por la educación, la identidad de la población indígena y los derechos de los más desfavorecidos. A ella se le atribuye la fundación de la “Federación Indígena Ecuatoriana” (FEI), en 1944. Así mismo logró la creación de la “Primera Escuela Indígena Autónoma” en 1945. En honor a esta heroica mujer la Escuela de Mujeres lideres en Ecuador y una calle en un sector humilde de Quito, llevan su nombre.
Transito Amaguaña, otra lideresa indígena, incansable defensora de los derechos indígenas ecuatorianos. El coraje y la inteligencia lo heredó de su madre, quien fue precursora de la rebelión indígena en Cayambe. Conoció muy joven a Dolores Cacuango con quien participó en la creación de los primeros sindicatos agrícolas del país. Tránsito fue luchadora incansable por la recuperación de las tierras y la dignidad del pueblo indígena. Por su valor, perseverancia, y tenacidad, fue condecorada con el Premio Nacional “Eugenio Espejo” (2004), concedido por el Ministerio de Educación y Cultura.
