Esperanza en la segunda vuelta electoral / Juan Diego Valdivieso Rowland

Columnistas, Opinión

El balotaje está definido. En la segunda vuelta electoral estará Andrés Aráuz, candidato por la lista 1 (UNES) y Guillermo Lasso, por las listas 6 y 21 (alianza PSC – CREO). Luego de un tortuoso proceso en el que hubo denuncias de fraude por parte de Yaku Pérez, candidato de la lista 18 (Pachakutik); un “acuerdo”, entre Lasso y Pérez para hacer el recuento aleatorio del 100% de votos en Guayas y del 50% en 16 provincias, pero que horas después se desvanecería; de una marcha indígena que avanza hacia Quito; y de anuncios de la Fiscalía y la Contraloría de revisar el sistema informático del Consejo Nacional Electoral (CNE), este organismo pudo proclamar los resultados en la madrugada del domingo 21 de febrero. 

Según Esteban Ron, especialista en temas electorales, existen tres posibilidades para retrasar el calendario electoral. La primera es la objeción a los resultados numéricos; la segunda es la impugnación en contra de una decisión adoptada por el órgano electoral. Y el tercer recurso es el subjetivo contencioso electoral, ante el Tribunal Contencioso Electoral (TCE), trámite que podría tomar hasta 26 días. 

Aparte de este complejo panorama que se avizora, hay que reconocer la apertura que ha tenido Guillermo Lasso hacia otras tendencias políticas. El 22 de febrero dijo que impulsaría la conservación ambiental y el desarrollo sostenible; la equidad de género y los derechos de las minorías. 

En un guiño a los sectores progresistas, Lasso dijo que “esta segunda vuelta de la campaña electoral se la dedicaré gran parte del tiempo a dialogar con los diferentes sectores del Ecuador”. También ofreció vacunar contra el Covid-19 a 9 millones de ecuatorianos en los primeros 100 días de su gobierno.

Por su lado, Aráuz ha conversado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y con inversionistas estadounidenses en Washington D.C. en EE. UU. Sin embargo, los mercados lo ven con recelo debido a que según la firma Profitas, Arauz insiste en que durante los primeros cinco días su gobierno necesitará mil millones de dólares y que esos dineros vendrán del Banco Central del Ecuador (BCE). Eso supone un riesgo para mantener el acuerdo entre Ecuador y el FMI. Además, el BCE garantiza el encaje bancario de los depositantes del sistema financiero.

Es hora de dar soluciones a los millones de ecuatorianos que están desempleados y que no tienen ninguna esperanza; a las madres solteras abandonadas y a los jóvenes que vieron truncados sus sueños; a los agricultores y campesinos que reclaman apoyo al sector rural; y a los defensores del medio ambiente, como yo, que queremos conservar el medio ambiente y no extraer recursos del subsuelo. 

@jdvrowland

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