Niños y abandono / Editorial

     En Ambato, lastimosamente, el drama humano aumenta a medida que, la falta de trabajo y oportunidades de resurgir con emprendimientos, han desencadenado una pobreza latente en nuestra ciudad, donde, incluso niños a cada hora del día, así como hasta altas horas de la noche, optan por pedir caridad en calles y avenidas.  

   Muchos de estos infantes han sido abandonados, evidenciando así un aumento de niños en casas asistenciales, espacios, donde, muchos pequeños requieren apoyo mental y físico. Esto ha generado zozobra y preocupación en instituciones ministeriales como el MIES, ya que, se vela por los derechos colectivos de los niños en condiciones precarias.

   Por ejemplo, el ‘Hogar Santa Marianita’, de nuestra ciudad, en buena hora, cuenta con un grupo humano de profesionales que atiende casos de casi 40 niños y adolescentes que, ante su problemática social (trabajo infantil, violencia física, psicológica y sexual, entre otros) se promueve una ayuda psicológica prioritaria.

  Estos casos se notan aún más en el centro ambateño, donde, en varias esquinas, niños incurren en la venta de fundas y, en la mayoría de los casos, son acompañados por los propios padres de familia, independientemente, si son locales o extranjeros, situación que genera un tema negativo de índole social por el incremento de este tipo de acciones, cuando los niños deberían estudiar, tener buena alimentación y que se garantice sus derechos.