Dulces artesanales conservan tradiciones
La Fábrica de Cocadas que se encuentra a la salida de Pedernales tiene cuatro años de permanencia en el paladar de la clientela que gusta la variedad y calidad de este sabroso producto natural, explicó el propietario Freddy Maza.
Las recetas de los abuelos, sumado a la creatividad de las nuevas generaciones se fusionaron para dar como resultado varias presentaciones de los dulces, convirtiendo a este sencillo negocio en el paso obligado de los turistas que degustan las sabrosas creaciones.
Originalmente estuvo instalado en Esmeraldas por 15 años y luego se decidió trasladarlo hasta Manabí, porque se observó que la tradición de los dulces a la carretera estaba ausente en esta región del país, agregó el propietario.
Se ofrece cocada blanca y negra, ajonjolí, maní, turrón de maní, dulces de guayaba, caramelo de caña, alfajores, dulce manaba para todos los gustos.
La elaboración es artesanal y se emplea leña para derretir la materia prima. Se conserva el sabor y se tiene el punto exacto para dar forma a cada dulce. La familia ha viajado a varias provincias del país para acumular experiencia y conocer de la fabricación de varios tipos de dulces para con esa referencia darle el toque característico de este negocio y transformarlo en delicias que son apetecidos por niños, jóvenes y adultos, agregó Freddy Maza.
Los deliciosos productos van desde cincuenta centavos hasta dos dólares; adicionalmente se vende café manaba en atractivas presentaciones.
La familia atiende desde las 08:00 hasta las 18:30 horas todos los días. Se espera seguir incrementando variedad de dulces a base de coco, caña y más. Los clientes también suelen contactarse al 0997530298 cuando desean reservar sus pedidos para la parentela, señaló el dueño. (I)