Diciembre: Nos trae el gasto y la reforma tributaria / Edison Narváez Z.

Columnistas, Opinión

En medio de la incertidumbre económica y sanitaria, llegó diciembre, mes de unión familiar, mes en el que la gente de manera sumisa ante el bombardeo promocional y publicitario consume de manera desmedida y hasta irresponsable. Ciertamente, para el sector del comercio éste es el mes más importante del año, y en muchos casos representa el mayor porcentaje de las ventas anuales. Así es diciembre, mes en el cual el consumo alcanza su máxima expresión, en esta ocasión también nos ha trae la reforma tributaria.

Efectivamente, acaba de publicarse la Ley para el Desarrollo Económico y Sostenibilidad Fiscal tras la Pandemia COVID 19; ley que entre otras contiene la reforma tributaria y que trae algunas innovaciones como el impuesto temporal al patrimonio, tanto para sociedades y personas naturales. En el primer caso, la contribución es para aquellas sociedades que tengan un patrimonio superior a 5 millones de usd (esta contribución deberá pagar por dos años consecutivos); en el segundo caso la contribución es para aquellas personas naturales que posean un patrimonio superior a 1 millón de usd, o la sociedad conyugal que tenga un patrimonio superior a 2 millones de usd.

Destacable la eliminación del impuesto a la herencia para los hijos del causante o para el cónyuge sobreviviente. En fin, son varias reformas que la sociedad las debate. Lo importante es motivar la economía para que esta crezca y genere empleo; particularmente estimo que la reducción del gasto impulsa la recuperación económica más allá de que se incrementen los impuestos

No obstante, más allá de esta problemática nacional, es evidente como la globalización con pandemia y todo, ha impuesto lo que denominamos la “Sociedad Consumista”, en donde el Marketing es el motor que mueve a esta generación de compradores compulsivos. No importa sino nos pagan el Décimo Tercero, la tarjeta de crédito aguanta……… Apreciados lectores, quienes no tienen la capacidad de administrar sus ingresos y de auto controlar sus impulsos, corren el riesgo de adquirir un endeudamiento extremo con las subsiguientes consecuencias.

Importante ahorrar en tiempos de crisis, y la clave para ahorrar consiste en empezar a pensar en gastar, pero en gastar mejor; en definitiva, modificar nuestra actitud y dejar de poner énfasis en aquello que no podemos gastar. (O)

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