Aglomeraciones sin control comercial
La preocupación crece en aquellos comerciantes catastrados que cuidan de su salud respetando las normas de bioseguridad al permanecer dentro de sus negocios; sin embargo, el informalismo se ha convertido en el punto crítico para la propagación del Covid-19.
“Nosotros llegamos a nuestros sitios de trabajo y respetamos las normas que dicen las autoridades, pero es lamentable ver que en los alrededores de la Plaza Primero de Mayo y la calle Tomás Sevilla no se respetan las normas básicas”, dijo Elena Gómez, comerciante.
Por más de cinco meses, el ECU 911 ha determinado que uno de los puntos críticos son los alrededores de dicho centro de acopio, cuyas cámaras de vídeo vigilancia captan la aglomeración de comerciantes y usuarios a diario.
La gobernadora de Tungurahua, Gabriela Rodríguez, indicó anteriormente que las normas básicas para evitar la propagación del coronavirus, es el distanciamiento entre personas de por lo menos dos metros, utilización de mascarillas y uso permanente de gel o alcohol antiséptico.
Pese a ello, la situación que se observa a través de las cámaras de vigilancia del ECU 911, es imposible de controlar desde que se registró la nueva “normalidad”.
Ante la situación, algunos vendedores esperan que haya la comprensión de los mismos vendedores, ya que en voz baja escuchan a diario sobre la afectación de seres queridos con el Covid-19. (I)