Valor de una sonrisa / P. Hugo Cisneros

Columnistas, Opinión

Creo que todos nos habremos dado cuento que la risa y la sonrisa son manifestaciones propias del hombre y exclusivos de él. La sonrisa es un lenguaje silencioso de nuestro interior, por ello hay risas nerviosas, más alegres, risas forzadas, risas falsas. Yo creo que el joven desde temprana edad, tiene que aprender a reír. Que la risa que aflora o sus labios tiene que ser expresión rica de su espíritu, por ello ninguno risa tiene que ser forzada, no tiene que ser gratificación o un favor recibido o una “salida de paso” de alguna circunstancias incómoda. 

La risa tiene que expresar nuestro estado de felicidad por eso tiene que ser franca, libre, abierta, contagiosa. Con la risa festejamos un momento de gracia, compartimos momentos de alegría, traducimos momentos de serena intimidad. Si vamos más o fondo descubriremos que la risa es vida. El hombre que vive, siempre sonríe, el pueblo lo ha dicho de otra manera: al mal tiempo buena cara. A propósito de todo esto me oportuno transcribir una lectura que hice en el libro «la alegría de vivir» de P. Bosmans que dice así: 

«Si no ríes, no vives la risa es salud. El buen humor es salud.  ¿Estás seguro de pensar lo suficienteen este aspecto de tu bienestar? Si, a causa de las preocupaciones,  envejece el corazón,  también tu rostroaparecerá pronto lleno de arrugas la risa libera. El humor relaja.  la risa es capaz de liberartede los falsos problemas la risa es el mejor cosméticopara tu belleza externa y la mejor medicina para tu vida interna. Si riendo, tus músculos trabajan regularmente, tu digestión resultará beneficiada, e incluso tu apetito se estimulará y tu presión arterial permanecerá estable la risa y el buen humor te liberarán de aquella lúgubre seriedad que vuelve los problemas pesados como el plomo; te liberarán, además, del triste «tran-tran» cotidianola risa y el buen humor crean espacios nuevos para alegrías desconocidas. Un día que no has reído. Es un día perdido. 

La alegría es algo gratuito, un aprendizaje, es consecuencia de vivir los valores y de hacer el bien, la alegría viene dada por el bien en uno mismo y en los demás, por lo tanto no es algo material ni depende del placer, ni de la riqueza, fama ,estatus, etc. 

Desde mi punto de vista, ser alegre o no serlo, depende de cada persona, del deseo de cultivarla, todo está en la actitud que tengamos hacia la vida.

Phil Bosmans menciona cuando puedes alegrarte de una flor, de una sonrisa, del juego de un niño, entonces eres más rico y más feliz que un millonario que tiene todo lo que pueda soñar. La posesión no enriquece, la alegría sí. 

Creo que las cosas materiales no son lo que verdaderamente importan en la vida, Podremos tener mucho dinero, pero si no tenemos motivos para alegrarnos, entonces no tendremos felicidad; debemos darle un sentido alegre a la vida y  disfrutar de cada acontecimiento que se nos presente. (O)

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