(NL). Serrano compareció ante la Comisión de Fiscalización de la Asamblea, en el marco de la sustanciación del juicio político al superintendente de Compañías, Víctor Anchundia. Lo hizo vía telemática desde Estado Unidos donde, dijo, vive actualmente, ya que ha sido amenazado por policías “corruptos” y bandas de narcotraficantes.

Según el exministro, con la aprobación de la exministra de Gobierno María Paula Romo, se autorizaron inversiones por cerca de 83 millones de dólares sin contratos.

 Aseguró que en la sesión del Consejo Directivo del Isspol del 27 de julio de 2020 se aprobó el canje de bonos 2020 por bonos 2030, Manifestó que hay una responsabilidad directa de Romo en la renegociación de bonos y en el ocultamiento de información.

Villavicencio también le preguntó sobre María Paula Christiansen, quien se encontraría también en Estados Unidos y que era su “mano derecha” en el Ministerio del Interior. Christiansen fue investigada por el presunto delito de tráfico de influencias, durante la gestión de Serrano.

El asambleísta exhibió la copia de un cheque por 230 mil dólares a nombre de Christiansen, firmado por Jorge Cherres, uno de los principales involucrados en la estafa al Isspol, el 13 de enero de 2018.

Para Villavicencio este cheque confirma la relación entre Christiansen y Cherres. “No creo que haya ninguna relación”, defendió Serrano. Además, evitó responder sobre su relación con Christiansen y se desvió del tema.(I)