¿Subsidios regresivos? / Ec. Mg. Diego Proaño

Columnistas, Opinión

 

Podría ser el término más adecuado para ejemplificar la aplicación de subsidios a los combustibles en Ecuador, que desde el año 2000, están congelados, no han subido un centavo. Pero ¿por qué?  aseveramos que este subsidio que ningún gobierno lo elimino oportunamente, cuando su aplicación es temporal, únicamente para ayudar desde el lado gubernamental a un determinado sector a contrarrestar alguna situación difícil, para luego de su recuperación retirarlo. Sencillo, porque esto se volvió un tema político y ningún gobierno quiso poner en juego su popularidad, incluso con muy buena aceptación e imagen en la población. Es regresivo porque el volumen mayor del subsidio lo reciben las personas de más altos ingresos, que poseen autos de alta gama tanto en precio como en cilindraje del motor, por ello se está beneficiando el 81,4% de la clase media y alta con el subsidio, es obvio visibilizar esto, un auto de alto cilindraje 3.500 cc por ejemplo, consume más del doble de combustible que un auto estándar de 1.500 cc, por tanto aun cuando los dos propietarios adquieren al mismo valor cada galón de gasolina, empero al que posee en vehículo de gama alta recibe más del doble del subsidio que el de gama baja, por tanto el gobierno habría terminado ayudando más a quien más dinero posee, este principio se denomina regresivo, quien más gana, menos paga.

Además de este inconveniente, que más ha pasado, al ser barata la gasolina subsidiada, el contrabando del combustible en las fronteras norte y sur del país aumentó, para venderlo a precios altos en los países vecinos, en Ecuador adquieren un galón de gasolina extra a 1,50 usd y vía contrabando lo introducen en Colombia para revender a 5 usd, obteniendo un lucro del 235%, también se ha incrementado el parque automotor, muchos hogares poseen 2 autos, situación que paralelamente a más de provocar contaminación ambiental, causan dificultad en la movilidad en las ciudades, pues existen más de 2 millones de autos livianos, 302.000 de transporte pesado y de carga y unos 30.000 en el sector público, la mayoría en circulación cada día., Con gasolina barata, el desperdicio del combustible es alto, todos quieren movilizarse en auto aun en distancias cortas, igual situación pasa con algunas empresas que utilizan las gasolinas como materia prima, con un costo bajo, no fueron tan eficientes y, lo más importante, con este subsidio eterno, el déficit fiscal de los gobiernos sobre todo cuando el precio del petróleo cae, termina incrementando y afectando a la liquidez de la caja fiscal y la ejecución del Presupuesto estatal.

Para colmo de males parecería que al subir el precio del petróleo, todo se arregla en nuestra economía, sin embargo no es tan así, porque con una producción interna de gasolinas que solo alcanza a abastecer el 55% de la demanda nacional, entonces el régimen debe importar gasolina obviamente sin subsidio, para vender en Ecuador con subsidio, importan un galón de gasolina extra y pagan 2,83 usd, más los costos de transporte internacional y otros ítems, para venderlo a las estaciones de servicio a 1,30 usd y que estas nos vendan a los propietarios de autos a 1.50 usd, por ello ahora ya se tomó en serio este problema y al parecer incluso con un costo político alto, tomaran alguna decisión, de lo que se ha dicho serán las gasolinas extra y súper las que sería afectadas, en subsidio a los combustibles (gasolina, diésel y gas de uso doméstico) el gobierno gasta al año 1.708 millones de usd, que representa el 50% de todos los subsidios. Que le queda al régimen eliminar, focalizar, reducir gradualmente, difícil decisión. (O)

 

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