Red transnacional de “coyoteros” operaba en Ambato

Equipos investigativos de Guayaquil, Fiscalía General del Estado, la Unidad de Investigación Contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes (UNAT), en coordinación con el Departamento de Justicia de Estados Unidos, ejecutaron la operación “Gran Fénix 57” y se logró desarticular una organización delictiva dedicada al tráfico ilícito de migrantes, falsificación de documentos, estafa y usura.
Tras varios meses de investigaciones, las autoridades identificaron que la red operaba en Quito, Guayaquil, Tulcán, Puyo y Ambato, en esta localidad se logró la aprehensión de un implicado de nacionalidad colombiana.
Los individuos mantenían conexiones internacionales en Colombia, El Salvador y Estados Unidos. Ofrecían visas falsas y cobraban hasta 20.000 dólares
De acuerdo con las indagaciones, los implicados engañaban a sus víctimas ofreciéndoles falsos procesos para obtener visas de trabajo tipo H2B. Para ello utilizaban documentación adulterada y cuentas bancarias falsas, logrando estafar.
Se estima que alrededor de 40 ecuatorianos fueron afectados por esta organización, que captaba a sus víctimas mediante redes sociales, utilizando cuentas con apariencia institucional de entes migratorios extranjeros, ofreciendo falsos procesos para obtener visas, según el jefe de la Subzona de Policía en Tungurahua, Jimmy Viteri.
Las víctimas recibían documentación falsa, certificados laborales ficticios y cuentas bancarias aperturadas sin su conocimiento. Además, la organización ofrecía rutas y facilitadores para salir irregularmente del país.
Allanamientos y detenciones
Con la autorización judicial correspondiente, las unidades operativas ejecutaron nueve allanamientos simultáneos en varias ciudades del país, lo que permitió la captura de ocho personas involucradas en distintos roles dentro de la estructura criminal.
Durante el operativo se incautaron: 20 teléfonos celulares, dinero en efectivo, documentos relacionados con la estafa y municiones.
En paralelo, autoridades de países cooperantes realizaron detenciones adicionales: dos en Estados Unidos, seis en El Salvador y tres en Colombia, lo que demostró el alcance transnacional de esta organización ilícita. (I)
