Recesión histórica/ Esteban Torres Cobo

Columnistas, Opinión

La recesión económica que vive el mundo es histórica. El parón coronavírico no se pensaba en estas magnitudes y la incertidumbre sobre lo que vendrá persiste, hasta que la vacuna asome por algún lado. Es que eso es lo que tenemos que pensar. La cura es fundamental, pero las lamentables secuelas del virus nos hacen añorar algo que evite el contagio, aun cuando ya no sea mortal, y por eso la vacuna representará realmente el alivio de este virus en nuestro entorno.

Lo que vivimos ahora, sin embargo, no es bueno. Ni con una inundación de dinero impreso en los países que lo pueden hacer se ha logrado subir el consumo, que alienta la producción y toda la cadena económica. El mundo está detenido y con una tos grave. La ruptura de negocios y emprendimientos se siente. Yo peco poco de pesimista pero si las grandes economías no levantan cabeza, tampoco espero mucho de la nuestra. Al menos no en el mediado plazo.

Situación inesperadas requieren soluciones inesperadas. ¿Qué podemos hacer para avanzar? Es la gran cuestión en todo el mundo. ¿Están las reglas del juego bien planteadas? ¿Cómo desatamos una feroz recuperación cuando el virus pase? (O)

Deja una respuesta