Qué va a pasar con las tasas de interés / Edison Narváez Z.

Columnistas, Opinión

En los últimos años casi que no se han modificado las tasas de interés, La Junta de Regulación Monetaria y Financiera (ente que regula las tasas de interés) no se ha conmovido ni siquiera por la presencia de la Pandemia que ha destrozado al sector empresarial. Las tasas de interés se mantienen inflexibles que ciertamente no permiten la reactivación de pequeñas y medianas empresas.

Para reactivar su economía, varios países y sus Bancos Centrales están flexibilizando su política monetaria con varias medidas: como Emisión de dinero, Operaciones de mercado abierto y Reducción de tasas de interés.

Como ya hemos dicho, en nuestro país la emisión de dinero no puede darse por ser un país dolarizado, la otra opción son las Operaciones de Mercado Abierto (Compra y Venta de activos financieros que realiza el Banco Central para inyectar liquidez al mercado), esto tampoco lo puede hacer nuestro Banco Central porque no tiene reservas. Entonces, la tercera opción para reactivar la economía sería las tasas de interés.

Para recordar estimados lectores, las tasas de interés que manejan las instituciones financieras son la tasa activa es decir la que se cobra por los créditos y la tasa pasiva que es la que se paga por ahorros o inversiones. La diferencia entre tasa activa y tasa pasiva es lo que se conoce como spread financiero es decir es la ganancia que obtienen las instituciones financieras.

Ahora claro lo que todo el mundo quiere es que bajen las tasas de interés para poder reactivar al sector empresarial. Muchos dicen que venga la banca internacional para que presione a la baja las tasas de interés, pero la pregunta es porque no viene la banca internacional, yo no conozco una ley que prohíba el ingreso de la banca internacional al país. El tema pasa por una falta de transparencia en el establecimiento de tasas de interés.

Adicional a ello hay un elemento adicional y es la ineficiencia por procesos lentos, sistemas obsoletos, personal no calificado etc. todo esto conlleva a que se incrementen los gastos por ineficiencia y se termine haciendo lo más fácil elevar la tasa de interés para compensar esa ineficiencia.

Por ello uno de los principales temas que debe priorizar el nuevo gobierno es el tratamiento eficiente de las tasas de interés de manera técnica y transparente no política; considerando factores como la liquidez existente, situación macroeconómica, demanda, oferta etc. El sistema financiero también tiene su responsabilidad y es el ser más eficiente para no cargar su ineficiencia al sector empresarial en especial al sector de la microempresa que paradójicamente es el sector que paga la mayor tasa de interés. (O)

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