Pueblo de Dios peregrina hacia el Creador
La misa concelebrada de Pentecostés se llevó a cabo en el coliseo cerrado de Ambato y fue presidida por el nuncio apostólico del Ecuador, Andrés Carrascosa Coso y todo el clero de la Diócesis de Ambato frente a miles de creyentes que coparon todo el lugar, ayer.
La Diócesis celebra los 75 años de existencia, y además la Conferencia Episcopal Ecuatoriana ha invitado a los católicos del país a reunirnos en oración a pedir por la paz y la justicia que son dones de Dios, es decir, que esto no sólo es labor humana, sino hay que pedir al Todopoderoso que todos seamos capaces de construir paz en nuestro alrededor. La paz nace en el corazón como don de Dios y cada uno debe ser constructor de paz (bienaventurados), señaló en su homilía el nuncio apostólico. (I)
