Positividad Tóxica / Psicóloga Clínica Alejandra Sánchez

Columnistas, Opinión

La positividad tóxica se refiere a la sobre generalización excesiva e ineficaz de un estado de ánimo feliz y optimista en todas las situaciones; en el trabajo, en casa, en nuestras relaciones, incluso cuando nos enfrentamos a un trauma o a una gran pérdida. La presión para ser felices y parecerlo es una problemática actual de suma importancia, ya que está afectando a muchos individuos resultando en un deterioro de la salud mental. Es esencial comprender que las emociones no son buenas ni malas, son parte evolutiva del ser humano y existen por alguna razón. El proceso de positividad tóxica da como resultado la negación, minimización e invalidación de la auténtica experiencia humana. Como todo lo que se hace en exceso, cuando se utiliza la positividad para encubrir o silenciar la experiencia humana, se vuelve tóxica, al desautorizar la existencia de ciertos sentimientos, caemos en un estado de negación, culpa y emociones reprimidas.

Las emociones existen para mostrarnos algo y si no las sentimos y procesamos adecuadamente, eventualmente, se empiezan a desbordar. Algunos ejemplos que se pueden tomar en cuenta para identificar esta problemática incluyen decirle a alguien que se concentre en los aspectos positivos de una pérdida, que no es necesario estar triste o enojado, que el pensamiento resolverá todos sus problemas, sugiriendo que las cosas podrían ser peores y avergonzar a alguien para expresar emociones negativas. Suprimir las emociones no solo es inútil, sino también es perjudicial para nuestro bienestar, los estudios han mostrado que la positividad tóxica afecta los aspectos psicológicos (cognición, emoción, y comportamiento). Por otra parte, la positividad saludable es una herramienta para mejorar la satisfacción en la vida, ver los problemas como un medio de crecimiento, sin suprimir ni avergonzarse de ninguna emoción. Varios estudios han mostrado que tener sentimientos genuinos de gratitud, autoconfianza o  esperanza puede mejorar la salud; por lo tanto, lo más importante es encontrar el equilibrio.

Deja una respuesta