Mujer indígena elabora balanceado natural

Interculturalidad
María Josefa Chuncha Caizaguano, radica en Ambatillo Alto, posee su pequeña maquinaria para el procesamiento de balanceado natural que vende a sus vecinos. (Foto El Heraldo)

María Josefa Chuncha Caizaguano, radica en Ambatillo Alto en la zona de Pucará cría 30 chanchos de raza y sigue ampliándose paulatinamente en esta iniciativa que tomó fuerza a consecuencia de la pandemia.

Los esfuerzos de su esposo y los suyos han hecho que vayan progresando paulatinamente hasta incluso llegar a procesar alimento balanceado para estos animales y convertirse en la zona en los proveedores de este producto.

En el balanceado natural coloca morocho, soya, afrecho de trigo entre otros.  Esta composición realiza su esposo y ella continúa. El quintal cuesta 34 dólares.

Molino, batidora, y más implementos pudieron ser adquiridos al vender algunos chanchos y otra parte con el préstamo en una cooperativa.

Considera que sí hay futuro en el campo siempre y cuando las personas decidan capacitarse de manera simultánea a su actividad en el campo o en la crianza de animales, porque así se puede tener otros referentes que estimulan al progreso  y desarrollo familiar, acotó.

Esta apreciación la hizo porque su esposo se capacitó y actualmente no sólo conoce como elaborar el balanceado sino que también ayuda a los comuneros en la inyectada de sus animales.

Pero no siempre esta situación en la familia fue así, ya que hace algunos años sus tres hijos varones debieron migrar al extranjero en busca de mejores oportunidades, ya que en esta familia a la pobreza, el hambre y la soledad fueron la constante en su diario vivir. 

Con el transcurrir del tiempo vendrían las oportunidades a su hogar pero lejos de sus hijos. Actualmente la mujer considera que daría todo por volver a ver a sus hijos a quienes extraña, pero sólo le resta orar y bendecirlos a la distancia, y mientras tanto, seguir en sus labores, tratando de ser mejor cada día y sirviendo a la comunidad. (I)

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