MEDICINA INTEGRATIVA ORIENTAL: Prosperidad espiritual / Klever Silva Zaldumbide

Columnistas, Opinión

Ha comenzado un nuevo año y con él, un mundo de oportunidades se abre ante nosotros. El momento es propicio para reflexionar internamente sobre experiencias pasadas, situaciones presentes y el porvenir. Aprendamos del pasado, disfrutemos el presente y construyamos un futuro mejor. Si nos detenemos por un momento y hacemos una pausa para mirar hacia atrás, podremos darnos cuenta que nos encontramos exactamente dónde nos han traído nuestras acciones pasadas. El ser humano construye su futuro día a día mediante sus pensamientos, palabras y acciones, y éstas a su vez van moldeando el presente.

Desde las más enigmáticas filosofías de nuestro mundo antiguo que no se clarifican, hasta las más hondas resonancias místicas y religiosas de la esencia del ser humano, con sus alegrías, sus penas, recuerdos y ambiciones, su propio sentido de la identidad personal y su libre voluntad han hecho que se mantengan muchas creencias y tradiciones seamos o no renuentes a creerlas. En Italia la noche de San Silvestre (31 de diciembre) se comen lentejas sobre todo en la zona de Roma, porque dice la tradición que quién las come contará con dinero todo el año. Los romanos y los napolitanos al llegar las 12.00 p.m. arrojan los trastos viejos como símbolo de acabar con el pasado y dar paso a un nuevo año. En Austria, en la noche de fin de año se toma el champagne en la Plaza de la Catedral de Viena, con música de vals que suena por todas las calles. En Grecia se celebra la Noche de Fin de año de manera similar a España. Esa noche destaca por el reparto del roscón de San Basilio. En él se incluye una moneda, quién tiene la suerte de comerse el trozo donde está la moneda tendrá un año muy próspero. Los niños de Bélgica les escriben a sus padres mensajes de Año Nuevo en papel decorativo y en Año Nuevo leen sus mensajes. El Año Nuevo Chino comienza entre enero 21 y febrero 19. La celebración dura cuatro días. En la última noche, la gente se viste como dragones para asustar y deleitar a los niños. En Japón, mucha gente adora en el Día de Año Nuevo. Costumbres modernas incluyen fabricar muñecos que son incinerados a las 12:00 am. satirizando personajes de toda índole, visitar a amigos y familiares; dar regalos; y hacer ruido con petardos, voladores, bocinas, campanas. En Sudamérica casi en general existen muchas costumbres supersticiosas, como comerse 12 uvas en los 12 segundos previos del nuevo año, tener tres maíces en la mano derecha, subirse a una silla, vestir ropa interior amarilla, rodear la manzana barrial con una maleta para augurio de viaje, etc.

La prosperidad verdadera de un ser humano que incide en su destino definitivo, es la prosperidad espiritual, no tanto el material, ya que la paz, el progreso, la honestidad, no sólo son posibles, sino inevitables ya que se podrían venir inimaginables horrores. Los líderes políticos, religiosos, y todos aquellos hombres y mujeres que tienen suficiente poder para influir en las masas, esperamos que se motiven a elevar su conciencia, su decencia, su vergüenza, su honradez, su honestidad. ¿Es una utopía?

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