LOS 488 AÑOS DE FUNDACIÓN DE QUITO EN VERSO / Patricio Chambers M.

Columnistas, Opinión

Han transcurrido 488 años desde aquel 6 de diciembre de 1534, en el cual Sebastián de Benalcázar llevara a cabo la fundación española de San Francisco de Quito.

Desde ese entonces la capital de los ecuatorianos se ha desarrollado como una de las urbes más importantes del continente, con todas las facilidades y también problemas de una gran metrópoli.

Estamos de fiesta y de las muchas formas que podríamos celebrar, esta vez hemos elegido hacerlo a través de la palabra, en especial aquella que está sujeta a la medida y cadencia del verso.

Su mismo himno es un verdadero poema creado en 1944 por los franciscanos Bernardino Echeverría y Agustín de Azkúnaga. Recogemos sus primeras estrofas:

Nuestros pechos, en férvido grito, / te saludan ciudad inmortal, / Gloria a ti, San Francisco de Quito, / en tu historia muy noble y leal.

En las faldas inmensas del monte, / tu grandeza buscó un pedestal, / para henchir tu ambición de horizonte, / y colmar tu ansiedad de ideal.

Oh ciudad española en el Ande, / oh ciudad que el incario soñó; / porque te hizo Atahualpa eres grande / y también porque España te amó…

Ponemos también a consideración del lector algunos fragmentos de poemas populares en su mayoría anónimos, con sus versos que nos hablan de la belleza de esta urbe y su gente:

Eres la Luz de América, que alumbra / la belleza y color omnipotente; / de este centro del mundo que vislumbra. / ¡Mi ciudad, Patrimonio diferente, / ciudad noble y valiente que deslumbra; / es mi Quito, la flor del continente!

Tanta hermosura hay en Quito / que dudo, al ver su primor, / si acaso es del cielo flor, /

si acaso es del mundo estrella; / es, en fin, ciudad tan bella / que parece en tal hechizo, /

que la omnipotencia quiso / dar una señal patente / que asid en el Occidente / el terrenal paraíso.

De igual modo, bonitas coplas que resaltan la belleza de la “Carita de Dios”:

A mi lindo Quito / las estrellas en el cielo / caminan de dos en dos / así caminan mis ojos / Quito por verte a vos.

En el arco de la luna / tengo un pañuelo volando / y en las puntas va diciendo / que mi Quito va encantando.

Lindo Quito de mi vida / Quito de mi corazón / Tus lindos paisajes / Son mi gran inspiración.

Y como no podía faltar, agregamos algunos piropos a esta ciudad Patrimonio de la Humanidad:

“Añoranzas de mi Quito, callecitas de mi Quito, de la Tola y La Guaragua, de mi niñez fuiste fragua, que forjaste a este guambrito.” (Efraín Cepeda)

“Quito, ciudad maravillosa, con cielo azul y de bellos días, capital de los ecuatorianos, cuna de libertad, canto de vida, que guardo en mi corazón, lo más precioso de este cantón.” (estudiante del Colegio Calacalí).

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