Lenguajes y gestos de odio a la Fiscal Diana Salazar

Columnistas, Opinión

En el transcurrir de estos seis años de funciones, la fiscal general de la Nación Diana Salazar dignificó esa institución pilar fundamental de la democracia, la mayoría del pueblo ecuatoriano le decimos gracias por jugarse la vida y la paz de los suyos, son más sus aciertos que los errores que ha cometido esta valiente mujer afroecuatoriana.

La Fiscal Salazar, no solo tuvo que enfrentar a las grandes cadenas del crimen organizado, la corrupción y el terrorismo, sino también los embates de los lenguajes de odio y difamatorio,  términos que se usan con la intención de denigrar, deshumanizar o incitar al desprecio hacia una persona por su raza, etnia y género, epítetos que han salido de manera regular  especialmente del Expresidente Rafael Correa sentenciado por sobornos y sus seguidores como: «abyecta», «incompetente», “corrupta” «criminal», “negra tal…”  

Durante el acto de acreditación de asambleístas nacionales, Paola Cabezas, utilizó un atuendo con la imagen pintada en el traje una protesta hacia la desaparición forzada de los 4 de guayaquil por parte de integrantes de las Fuerzas Armadas, y siempre repetía las frases: “Las infancias negras importan”, totalmente de acuerdo, a todos los afroecuatorianos si nos importan las infancias negras y sobre todo clamamos justicia por Ismael, Josué, Nehemías y Steven. Le pregunto a la Asambleísta Cabezas, ¿Por qué no hizo lo mismo con todos los ataques de odio y amenazas de muerte que ha recibido la hermana afroecuatoriana Diana Salazar? ¿O acaso para Usted las mujeres negras no importan? 

Este miércoles pasado, el pleno de la Asamblea Nacional se dio cita para discutir, entre otras, la renuncia que presentó la fiscal Diana Salazar. El bloque de los legisladores RC5 incluida Paola Cabezas, Roberto Cuero y Fricson George, decidieron darle la espalda al pleno de la Asamblea Nacional como una protesta a Diana Salazar. 

Lamentable que esto se dé, cuando un afroecuatoriano no reconoce o no respalda la labor de otro hermano afroecuatoriano que ha trabajado con entrega y visión por el bienestar del país. Nuestra historia está marcada por luchas compartidas y por un legado de resistencia y dignidad que nos llama a la unidad, no a la indiferencia. Cuando alguien de nuestra comunidad se destaca por su esfuerzo y compromiso, incluso si su impacto no ha sido directo en espacios particulares, su logro representa un avance para todos. Si el contexto involucra a una persona afroecuatoriana que ha sido atacada con estos términos por otro miembro de su comunidad, esto también puede verse como una forma de autonegación o falta de solidaridad intraétnica, lo cual agrava el impacto social del agravio.

No se trata de aplaudir ciegamente, sino de valorar objetivamente y con justicia el aporte colectivo que muchas veces rompe barreras históricas de exclusión. Dividirnos nos debilita, pero reconocer y apoyar lo bueno, nos fortalece como pueblo y como nación. Gracias hermana Diana por darnos pertenencia y amor por el país. (O)

Deja una respuesta