LA TORMENTA PERFECTA / Ec. Diego Proaño Córdova

Columnistas, Opinión

Con todos los acontecimientos que se vienen dando en el mundo, parecería ser que estaríamos rumbo a la tormenta perfecta, tal como sucedió en esa extraordinaria película de George Clooney en las vivencias sufridas por un grupo de pescadores en donde agentes externos se ensañan con ellos hasta ponerlos a prueba su habilidad de supervivencia. Esta trama parecería estamos viviendo los habitantes de la tierra en estos tiempos, con tanta situación que día a día se nos presenta y debemos lidiar para sobrevivir. Nuevos confinamientos por la pandemia, crisis alimentaria, escasez, guerra Rusia Ucrania, dificultades en las cadenas de suministros, altas tasas de interés, caída de los índices bursátiles, política mentaría restrictiva e inflación global galopante.

Al cierre de mayo todos los países están presentando datos de inflación que superan el 7 y 8% anual, eso se traduce que ningún salario soporta tal incremento, por tanto, el poder adquisitivo de las familias se deteriora peligrosamente. Por otro lado, los gobiernos anuncian todos los días medidas antiinflacionarias como el aumento en sus tasas de interés nacionales, sin que con esto se detenga la inflación a ultranza. Tampoco es que ayuda para nada que el precio del petróleo siga sobre los 100 dólares sin expectativas de que baje al menos en el corto plazo, lo que ha provocado una subida importante en el precio de las gasolinas y derivados de petróleo, es decir en la movilización de productos, servicios y personas.

La continuidad del problema bélico entre Rusia y Ucrania, esta causando escasez de fungicidas y materia prima para la agricultura en el mundo, lo mas visible y preocupante es el de la canola y el girasol con que se fabrica los aceites, su poca producción han hecho que estos suban en los supermercados hasta 200% su precio anterior. Los agricultores se quejan de los precios de la urea y otras materias primas para sus procesos de producción, manifiestan que sus costos aumentaron, por lo tanto el precio de comercialización también, en resumen los precios del transporte y de los alimentos y bebidas no alcohólicas suben todo el tiempo, afectando a las canastas familiares en el mundo entero.

Es urgente que las autoridades mundiales, los lideres, los gobernantes, los organismos internaciones, los empresarios, tomen cartas en el asunto para mitigar este gran problema mundial. A nivel nacional tampoco se ve acción por parte de autoridades para evitar siga incrementado peligrosamente la inflación que dicho sea de paso es baja por efectos de la dolarización.

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