“Justicia” inescrupulosa y descarada / Juan Diego Valdivieso Rowland

Columnistas, Opinión


La indignación ciudadana aumenta por el accionar inescrupuloso y descarado del sistema judicial en Ecuador. Parece que algunos jueces y fiscales favorecen a los “presuntos” delincuentes, porque a pesar de que son capturados en flagrancia, los liberan el mismo día con la condición de pedir disculpas públicas y que paguen una multa de USD 500, como ocurrió en Quito hace unos días.

Los ecuatorianos de bien, que somos la mayoría, miramos indignados cada semana la actuación del sistema judicial, que libera ipso facto a delincuentes de toda calaña.

Los antisociales asesinan a sangre fría por un celular. Asaltan y agreden por robar cualquier objeto de valor a hombres, mujeres, jóvenes, personas de la tercera edad o menores de edad indefensos que salen a las calles.

Esta es la lamentable realidad que afrontamos. Cuando salimos a la calle, tenemos temor de ver circular una motocicleta con dos personas. O al ir a un restaurante o cafetería y tenemos miedo cuando se acercan personas sospechosas.

En todas las ciudades se registran hechos delictivos, sin embargo, la reacción de las autoridades difiere en cada jurisdicción. Si bien la Constitución de la República determina que la seguridad ciudadana es competencia del Gobierno Nacional, a través de la Policía Nacional y Ministerio de Gobierno, la ciudadanía exige que sus autoridades locales actúen.

Esto ya ocurrió en Guayaquil, donde el 30 de noviembre se instaló el Comité de Seguridad para coordinar acciones contra la delincuencia. Autoridades locales y nacionales coordinan la llegada de 500 policías adicionales para tareas preventivas y 150 agentes de unidades tácticas.

Otra es la historia en Quito, que parece no tener alcalde ya que cuando debe asumir responsabilidades, brilla por su ausencia. En el caso de Ambato, el alcalde tampoco propone ninguna solución o acción conjunta como en Guayas.

Es mejor no esperar mucho del actual sistema judicial. Por eso es fundamental alzar nuestra voz para que el Consejo de la Judicatura sancione a los malos jueces y fiscales. También debemos exigir a nuestras autoridades locales y nacionales que tomen acciones urgentes para frenar la actual ola delincuencial que nos obliga a dormir con un ojo abierto. (O)

@jdvrowland

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