Hernando de la Parra “El Viejo” primer dueño de los salasacas. 1569 / Pedro Reino Garcès

Columnistas, Opinión

Digamos en visión panorámica que Hernando de la Parra puso bajo su control y dominio a los salasacas. Es un conquistador que irrumpió con Benalcázar por nuestros lares. Pueden leer en mis investigaciones y por ello me he dedicado a seguir sus rastros. El presente documento dice que el mayorazgo de De la Parra comprendía los pueblos de Chumaquí (García Moreno actual en Pelileo), Mocha, Pachanlica, los Puruhaes, Totasi, Dosi, Polo y el pueblo de Aranbassonos. Esto a más de Picaigua y El Rosario actual de Pelileo que constan en escrituras posteriores. Curiosamente no se menciona a salasaca, pero muchas escrituras son con la gente de este lugar.

Hernando de la Parra “El Viejo”, debe ser estudiado en dos instancias ligadas a la tenencia de la tierra: la primera, por su accionar junto a Benalcázar y al reparto que hicieron con la fundación de Quito; y la segunda, el reparto que obtuvieron los beneficiarios realistas que respaldaron a La Gasca, luego del degollamiento del virrey Blasco Núñez de Vela en la llamada Batalla de Iñaquito.

Estuvo casado con Elvira Salinas en primeras nupcias. Según documento de 15 de marzo de 1567, su hijo, llamado Hernando de la Parra “El Mozo” pidió en esa fecha licencia para pasar a Indias, para ver y conocer a su padre y pedirle la herencia que le correspondía de su madre que había fallecido. Al llegar a Quito, se encontró con que su padre había vuelto a contraer matrimonio con Francisca del Corral con la que ya había procreado 6 nuevos hijos, y el primero de ellos otra vez tenía el nombre de Hernando de la Parra (Corral). Según documentos de partición, los dos hermanos Hernandos de la Parra se reparten encomiendas de tierras con indios esclavizados.

En documento de Hernando “El Mozo” dice que ya está avecindado en Quito “Sepan quantos esta carta vieren como yo Hernando de la Parra el mozo, natural que soy de la billa de Baltanás de los reynos de Castilla, hijo lejítimo de Hernando de la Parra, mi señor y padre, vecino que es desta ciudad de San Francisco de Quito de los reynos del Perú”. Además de declarar que está legítimamente casado con Elvira Núñez, dice que tiene 42 años a la citada fecha del documento, aclarando que ya ha pasado cosa de un año desde que salió de los reinos de Castilla. En efecto dice que viene “para heredar y subçeder en el feudo e mayorazgo de los yndios que el dicho my padre tiene encomendados por título de encomienda de su magestad y conforme a las leyes e derechos que su magestad tiene fechas y declaradas açerca de subceder // del dicho feudo e mayorazgo, a mí me pertenece por ser hijo mayor del dicho Hernando de la Parra”.

Como dote otorgado por su segunda  esposa “El Viejo” recibió 8.000 pesos de plata, que tiene el carácter de deuda, “y de otros dos mill pesos de oro de ley perfeta que pareçe haberle prometido e mandado en arras y donación proternubcias, según se contiene en la escritura de dote e promessa que el dicho mi padre hizo e otorgo en su fabor” de su segunda esposa. Esto consta en documento hecho en la Ciudad de los Reyes (Lima) ante el escribano de su Majestad Francisco Álvarez, con fecha 11 de mayo de 1549. En lo subsiguiente del documento “El Mozo” dice que está de acuerdo en respetar la voluntad de su padre de dividir la herencia con los hermanos de su segundo matrimonio.

Sobre los feudos del mayorazgo  dice que hereden los pueblos que quedan señalados “sin faltar ninguno de los caciques e indios a ellos sujetos e según los tiene y posee el dicho Hernando de la Parra, rentas e tributos dellos para todo tiempo… con lo anexo yperteneciente al dicho feudo e mayorazgo”. A más de esto, el Mozo indica que su padre le había enviado 352 pesos de oro a los reinos de Castilla. No podía faltar el oro y la plata: “De los 3.500  pesos de oro dice “me doy por contento por quanto los recibí en presencia del escribano desta caussa en honce thexos e ciertos pedazos de oro de diferentes leyes e docientos y ochenta pesos de plata marcada que los balieron e montaron, del qual entrego de los dichos texos de oro e plata yo el presente escribano doy fee que en mi presencia e de los testigos desta carta el dicho Hernando // de la Parra el biexo los dio e pago al dicho Hernando de la Parra, su hijo, y él los recibió e llebó en su poder, fecha la quenta en mi presencia del dicho oro y plata e de los quinientos y ochenta y dos pesos e dos tomines de la dicha plata”. Terminemos el dato con algo alentador que hace su hijo cuando regresó a Castilla: “yten, mando que se digan diez misas a loor del Espíritu Santo por la conversión de los indios que Hernando de la Parra mi padre tuvo en Indias”. (La autoría del documento corresponde a Tamara Estupiñán Viteri, quien ha puesto en página virtual estos datos en 2017, bajo identificación: Hernando de la Parra, un palentino en la conquista del Perú y fundación de Quito).

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