Garantizan calidad para exportación

La Dirección de Agrocalidad en Tungurahua, por medio de su unidad de Sanidad Vegetal, desempeña un papel esencial en el control y certificación de productos agrícolas destinados a la exportación. Este riguroso proceso asegura que el producto primario cumpla con los estándares internacionales de calidad e inocuidad.
Espartaco Altuna, director de Agrocalidad en la provincia, explicó que se atienden los requerimientos de los usuarios que buscan exportar, siendo el tomate de árbol del cantón Baños un producto con un fuerte flujo de exportación. Altuna destacó la motivación de los productores para hacer las cosas correctamente y acceder a mercados internacionales.
El proceso de exportación exige a los productores el cumplimiento de varios parámetros críticos. El primero y fundamental es un monitoreo de la mosca de la fruta, un requisito fitosanitario crucial exigido por muchos países de destino, como es el caso de Estados Unidos.
Este monitoreo debe realizarse por un periodo mínimo de un año e implica la ejecución de planes de manejo fitosanitarios para verificar la ausencia o baja incidencia de este insecto que podría causar problemas sanitarios en el destino.
Adicionalmente, se exige la certificación en Buenas Prácticas Agrícolas (BPA). Esta certificación garantiza el cumplimiento de los cuatro pilares fundamentales de inocuidad, cuidado del medio ambiente, bienestar animal (si aplica) y la protección del personal.
Agrocalidad realiza inspecciones directas en los predios agrícolas cada vez que se requiere una exportación. Los técnicos verifican el origen del producto, en este caso el tomate de árbol, y emiten un certificado de movilización fitosanitario para dar el aval.
La verificación se extiende hasta la logística de transporte. Agrocalidad se asegura de que las condiciones del camión o vehículo que trasladará el producto hacia puerto o aeropuerto sean las adecuadas, garantizando la inocuidad del producto durante toda la cadena.
Altuna subrayó que Agrocalidad no solo verifica la ausencia de la mosca de la fruta, sino que también inspecciona la presencia de cualquier otro tipo de plagas o enfermedades que puedan diseminarse en el fruto. Se revisa el cumplimiento de los procedimientos estandarizados de sanización, manejo de malezas, uso de fertilizantes y plaguicidas, asegurando que todos los parámetros estén alineados con las regulaciones de la agencia. (I)