El preocupante riesgo país / Ec. Mg. Diego Proaño, PhD (c)

Columnistas, Opinión


El indicador que mide el riesgo de no pago, perdida, descuento o castigo en el valor de los bonos del Estado, o de expectativa de recibir inversión extranjera, llamado  EMBI (Emerging Markets Index Bonds) o Riesgo País, que calificadoras de riesgos de mucho prestigio y con metodologías muy rigurosas, nos monitorean en aspectos de gobernabilidad, paros, huelgas, grupos de poder, corrupción, indicadores macroeconómicos, deuda pública, entre otros,  en los últimos días, ha comenzado a subir preocupantemente. Al momento solo Venezuela y Argentina en toda América, nos superan en riesgo, Ecuador se encuentra en el tercer lugar. En relación a nuestros vecinos que tienen económica comparables a la nuestra, Perú tiene un EMBI de 88 puntos y Colombia 176 puntos, cifras qué frente a los 1.033 puntos de nuestro país, nos pone en tremenda desventaja en todo sentido.

Para poner en términos coloquiales el tema, cuando un inversionista quiere comprar bonos del Estado ecuatoriano o traer sus recursos e invertir en alguna actividad productiva o negocio, aspira al menos a que, su redito sea igual al porcentaje que arriesgará sus recursos por llegar al país, es decir 10%, frente al 0,8% de Perú y 1,8% de Colombia, entonces claro si no tiene las garantías que, la tasa de rentabilidad esperada, cubrirá el riesgo, entonces decide no traer la inversión a Ecuador e irse por otros países, por ello la inversión extranjera directa IED, es mínima permanentemente, en 2018 la cifra más alta llegó a 1.401 millones de USD y en 2019 hasta el tercer trimestre 610.84 millones, que de seguro al momento de incluir el cuarto trimestre (el del paro nacional), no llegará ni a 1.000 millones de IED, por la incertidumbre y alto riesgo.  Frente a importantes inversiones que reciben Colombia 9.000 millones de USD y Perú 7.000 millones de USD.

Lo peor de todo es que, primero desde octubre que se disparó el EMBI, ha sido imposible reducir el riesgo, por el contrario, la tendencia siempre ha estado al alza, los 622 puntos que marcaba el riesgo país al tomar el mando el 24 de mayo de 2017, casi se ha duplicado el EMBI, con el salto desmesurado cuando se archivó al primer proyecto de las reformas tributarias y posteriormente con los acontecimientos de octubre con el paro, y bloqueos. En estos días vuelve la tendencia alcista de riesgo, porque lamentablemente los actores políticos y sociales, le siguen echando más leña al fuego, cuando se amenaza con nuevas paralizaciones, cuando se destapa nuevos hechos de corrupción y lo peor con total impunidad, cuando los discursos oficiales dentro y fuera del país son contrarios a la paz, certidumbre y confianza, cuando vemos como aumenta la inseguridad ciudadana, informalidad, desempleo, pobreza y todos critican, pero nadie propone nada, si no se cambia de actitud y ejecutividad, el riesgo no bajará. Es el momento de los consensos, de los acuerdos mínimos, de las propuestas, de la acción. La demagogia y la politiquería nos seguirán haciendo más daño al país. (O)


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