Rechazo a las agresiones / Editorial

Diversos colegas de medios de comunicación han cuestionado y denunciado, el accionar de ciertos individuos que, al reportero, por cubrir las protestas, marchas y cierres de vías que conectan diferentes provincias, es amenazado e insultado, solo por realizar su trabajo periodístico. 

    Si bien los protestantes, en ciertos casos, han sido amables, dando las facilidades del caso a la prensa, otros actúan de manera violenta, generando miedo en el periodista que busca evidenciar la realidad de lo que está pasando en el país y plano local. 

    Lastimosamente, a través de un vídeo, se ve a un periodista de un importante medio nacional, que casi fue linchado por una turba enardecida, algo que como prensa rechazamos categóricamente, por un actuar bajo y cobarde. Y no se diga a lo que le tocó vivir a un agente policial, a quien, en masa, le cayeron a golpes, algo inaceptable. 

    Si algo destacamos es que, la marcha de diferentes comunidades indígenas de Tungurahua, realizada ayer, fue un ejemplo de una protesta pacífica, justamente, manteniendo la unidad del pueblo, sin necesidad de dañar y destruir la propiedad pública y privada, donde, incluso la Policía Nacional, en los exteriores de la Gobernación, destacó la tranquilidad de la marcha.  (O)