Abandono comercial / Editorial

   La soledad se ha apoderado en el centro de Ambato, dada la quiebra de locales comerciales a lo largo de la avenida Cevallos. Esto, diariamente, se evidencia por la falta de circulante económico y acuerdos con arrendatarios.

  No tener un espacio físico para poder ofertar productos, para algunos comerciantes, ha sido un suplicio. Les ha tocado promocionarse en redes sociales y laborar a domicilio; no obstante, argumentan que no es lo mismo, ya que al tener un local se genera otro tipo de dinámica en cuanto a ventas.

    De igual manera, en centros comerciales, pese a que ciertos locales están abiertos, la gente no está acudiendo, por miedo al contagio. Ciudadanos expresan su inconformidad con arrendatarios, porque no les bajan el costo de la mensualidad y no entienden la necesidad de trabajar, aunque sea para ir pagando en pequeñas cuotas.

   La pandemia del Covid – 19 en nuestra ciudad, ha generado un ambiente de soledad. El incremento de pobreza es mayoritario, por parte de gente que le ha tocado salir de sus negocios y la desesperación es aún más evidente; la delincuencia está en auge. Se ha perdido esa alegría en diferentes calles comerciales, el entretenimiento ha muerto y, a partir de las 18:00 horas, la zona céntrica ambateña es un pueblo fantasma.