Pago a Maestros Jubilados / Editorial

Editorial

   A los maestros ecuatorianos que educan en valores morales y brindan enseñanza en ciencias y tecnología a las generaciones presentes y futuras, se les debe respeto, consideraciones y reconocimiento a la dura tarea que cumplen  todos los días, con verdadera vocación de servicio, con desinterés y por amor a su profesión.

   No obstante esta realidad, ciertas autoridades que se llenan de elogios a los Maestros y sus labores cumplidas con abnegación,  el momento de reconocer sus derechos elementales, se niegan a cumplir sus obligaciones económicas, acudiendo a subterfugios  sin fundamento y a pretextos traídos de los cabellos.  De esta manera evidencian su doble personalidad.

   Especialmente en el gobierno anterior, esta actitud oficial se la mantuvo en forma sistemática.  Los beneficios legales a que tienen derecho los maestros que se jubilan fueron conculcados, se dio largas al asunto para  incumplir las obligaciones.  Ante los reiterados reclamos de jubilados de varias etapas, hubo respuesta amenazante.

   Luego de trascurridos varios años de incumplimiento, el actual Gobierno ha dispuesto el pago de todos los beneficios económicos a los maestros jubilados.  Ha comprendido que en la ancianidad es indispensable aplicar la solidaridad social  con hechos y no solamente con palabras  que se lleva el viento.  Aplaudimos la acción del Gobierno.

   Jamás en el futuro deben repetirse estas acciones discriminatorias con los   Maestros que, insistimos, merecen el reconocimiento público y la gratitud de toda la sociedad que es la beneficiaria de su  trabajo.

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