Ebrio manchó Viernes Santo
En un día que debió haber estado marcada por la reflexión y la serenidad, Ambato fue testigo de una escena caótica y dolorosa. En la intersección de las avenidas Manuela Sáenz y Antonio Clavijo, un conductor ebrio desató un aparatoso accidente que dejó a su paso heridos y daños materiales, el 29 de marzo, Viernes Santo.
El impacto entre un bus de transporte urbano y una grúa particular resonó en la ciudad dormida, rompiendo la calma de este Viernes Santo. El irresponsable acto del conductor de la grúa, quien desafiando las normas y el respeto que esta fecha religiosa merece, se cruzó el semáforo en rojo, desencadenando el caos en la vía.
Entre la confusión y el estruendo, pasajeros y conductores resultaron con golpes leves, recordando de manera trágica la importancia de la prudencia al volante. Los vehículos, testigos mudos de la imprudencia, fueron retirados mientras las autoridades detenían al responsable, marcando así una dolorosa lección en esta jornada de reflexión y recogimiento.
Imágenes del lugar muestran la magnitud del accidente, con ambos vehículos visiblemente afectados y el caos reinando en la escena. (I)