Camino a la nariz del diablo / Luis Alfredo Silva
Si usted quiere conocer «La Nariz del Diablo» tome, desde la ciudad de Ambato, la carretera Panamericana que va por el sur de nuestra la provincia, que conduce al extenso y verde páramo de Urbina, por el que ingresa a la provincia de Chimborazo. A la entrada a la ciudad de Riobamba, continúe por la vía que le lleva a los cantones Coita, Guamote y Alausí, sucesivamente.
En la ciudad de Alausí, deja su vehículo y compre su pasaje en la estación del ferrocarril. Aborda el tren y un sonoro pito de la locomotora, anuncia el inicio del viaje. Lentamente va descendiendo por la línea férrea, hasta el valle que origina el río Alausí. Dos puentes sirven para atravesar el río, para definitivamente seguir por la ladera izquierda. El río sinuosamente, va abriendose paso entre grandes montañas, formando hermosos paisajes.
El camino, rumbo a «La Nariz del Diablo», es rocoso y alto, lo que nos indica la proximidad a esa escarpada montaña. El ferrocarril va por un estrecha senda, en donde se han colocado los rieles en zigzag, para permitir ir avanzando y retrocediendo, que es única manera de salvar la brupta ladera, para arribar hasta la estación de Sibambe. Así se viaja, casi rozando los declives rocosos y admirando sorprendido los profundos abismos que causan temor.
Desde la estación de Sibambe, se puede apreciar la aguda e imponente montaña conocida con el nombre de Condorpuñuna, a la que posteriormente se le bautizó con la denominación de «Nariz del Diablo», por su forma y por el terrorífico paso del ferrocarril, en ese sector, que pertenece a la parroquia de Pitishí, del cantón Alausí.
En Sibambe, los turistas pueden disfrutar de comidas típicas y ancestrales bebidas. También, pueden adquirir artesanías confeccionadas por los nativos y visitar el museo histórico de textiles y cerámica.
Es un recorrido de 13.5 kilómetros, que se demora, aproximadamente, una hora con treinta minutos, siguiendo la antigua ruta del ferrocarril Guayaquil Quito.
Este tramo del ferrocarril, construído por el ingeniero Jhon Harman, con miles de trabajadores de Jamaica y Ecuador, se terminó en el mes de Agosto de 1.901, culminando así una obra maestra de ingeniería, que constituye «El Ferrocarril más Difícil del Mundo». (O)
El Ecuador que todos debemos conocer
