Arte navideño brilló en Ambato

Carrusel

La gala artística «Bajo las estrellas de Navidad» se consolidó como uno de los eventos culturales más relevantes de la temporada en Ambato. Con una estructura dividida en tres actos principales, la Escuela de Ballet Warmi Wayra presentó un repertorio que combinó la ternura de la iniciación dancística con la complejidad del ballet clásico y el baile de salón.

El programa inició con las categorías formativas: Baby Ballet I y II con el tema «Fiesta de Sonidos y Patitas», Inicial I con «El Jardín de las Flores» y Pre Ballet con «Bichitos». Estas presentaciones iniciales permitieron observar el semillero de artistas que se forman en la institución, quienes con trajes coloridos y movimientos coordinados abrieron la noche de gala.

El Acto I estuvo dedicado al Ballet Coppelia, donde destacaron piezas como la «Mazurka» interpretada por el grupo de Baile de Salón B, y la conmovedora escena de la «Pedida de mano de Franz a Swanilda». La interpretación de los roles principales por parte de los alumnos más avanzados mostró una ejecución técnica impecable que fue ovacionada por los asistentes al auditorio.

En el Acto II, denominado «Muñecas Mecánicas», se presentaron variadas coreografías que incluyeron muñecas de palo, chinas, de trapo, escocesas, de ojalata y de cuerda. Este segmento destacó por la creatividad en el vestuario y la interpretación actoral de los bailarines, quienes lograron dar vida a los personajes mecánicos con gran precisión rítmica.

El cierre del espectáculo llegó en el Acto III con un elegante «Pas de Deux» a cargo de Camila Peñaloza y Damián Pérez, seguido por la intervención musical del Taller de Guitarra. La dirección artística de Andrea Mora y el trabajo coreográfico de Mara Pangol y Brian Chávez fueron fundamentales para el éxito de esta puesta en escena que integró diversas disciplinas artísticas.

La nómina de integrantes fue extensa, contando con la participación de grupos como Baile de Salón A, liderado por figuras como Beatriz Acosta y María Teresa Arana, y el grupo Matutino. La diversidad de edades y niveles en escena reflejó el carácter inclusivo de la escuela, permitiendo que desde niños hasta adultos compartieran el escenario bajo el auspicio de la Unidad Educativa Sagrada Familia e instituciones locales.

Este evento gratuito no solo sirvió como una vitrina para el talento local, sino también como un espacio de recreación sana para las familias ambateñas. La impecable organización y el apoyo de la Dirección Provincial del IESS permitieron que la cultura fuera el centro de la celebración, reafirmando que el arte es un vehículo esencial para el bienestar social y la promoción de valores en la comunidad. (I)

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