‘La pelota no se mancha’ / Editorial

La icónica frase a la que hacemos referencia del titular puesto en mención fue expresada por el exfutbolista argentino Diego Armando Maradona (+) cuando se retiró del fútbol. Tomamos esta expresión, ya que, lastimosamente, el fútbol ecuatoriano está manchado de sangre, tras las muertes violentas de jugadores en este último año. 

   Sin duda, la razón principal de estos decesos ha sido vinculada a las apuestas deportivas en partidos y, lo preocupante de esto, es que ha traspasado el ámbito profesional, donde, la ética deportiva comienza desvanecerse y no solo en el fútbol, sino en deportes como el Tenis y Baloncesto.

   Lastimosamente, la codicia y el interés por ganar más dinero, está costando la vida de deportistas, dadas las amenazas y presiones por terceras personas que, prácticamente, obligan al jugador de fútbol, en este caso, a que juegue mal, siendo intimidados en cada cotejo.

   No obstante, ciertos jugadores, de igual manera, sin ningún tipo de presiones caen en estas apuestas con el fin de ganar más, donde solo les interesa el dinero y el respeto a las instituciones y equipos de fútbol se opaca por tener réditos de miles y millones de dólares.