El viaducto Yahuira y la circulación vehicular / Carlos Rosero

Al igual que las grandes ciudades, en nuestro medio la circulación vehicular en estos últimos tiempos se ha transformado en un conflicto de movilidad por la cantidad de vehículos en circulación, sobre todo en las horas pico, al respecto se pretende buscar una cura, la que es peor que la enfermedad, al igual de lo que sucede en Quito, que se optó por el pico y placa, ahora con la palabra: «hoy no circula», ha permitiendo que en lugar de mejorar la circulación, se haya triplicado el parque automotor, en vez de haber mejorado la movilidad, transformándose en mas caótica, si tomamos en consideración que cualquier restricción a la libre circulación por las vías y carreteras del país, es una acción inconstitucional, ya que ninguna norma inferior puede estar sobre la Constitución, es preferible la congestión, que una camisa de fuerza, que causa más daño a la necesidad de transporte.

En el caso de la ciudad de Ambato, restringir la circulación por el Viaducto Yahuira, fijando determinado tiempo la circulación en un solo sentido, es desconocer la ciudad, o no conocer la forma de circulación, al ocupar los dos carriles en el mismo sentido, a la salida y entrada del viaducto se va ha formar en cuello de botella peligroso, con la ocupación de mayor número de agentes de tránsito; la libre circulación en los dos sentidos, facilita la agilidad de la circulación, como no tenemos otras vías de ingreso y salida de vehículos para la parte sur de la ciudad, a más que la calle 13 de Abril, permitirá una congestión vehicular desesperante, en la indicada calle, ya que no circulan solamente vehículos livianos, sino también pesados en los dos sentidos, que al llegar al paso elevado de las calles 12 de Noviembre y Mera, se transforma en un cuello de botella de dificil movilidad; de allí que la disposición de limitar la circulación con horarios es una medida desacertada, que por inconveniente, debe dejarse sin efecto.

El problema de la congestión vehicular en el centro de la ciudad, es la semaforización inadecuada, a lo largo de las calles, todos los semáforos se prenden en rojo, todos en verde, si dentro de una cuadra los vehículos están esperando en cola que se prenda el verde, cuando se ha prendido el verde por lo largo de la cola, no ha logrado cruzar todos, nuevamente se prende el rojo, otra espera hasta que se prenda el verde, esto va sucediendo a lo largo de la calle, entorpeciendo la circulación; si los semáforos estuvieran sincronizados, que conforme se va avanzando se fuera prendiendo el verde, la circulación sería rápida y segura. (O)