12 de Noviembre: Controles y clausuras no quitan el miedo de moradores

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La zona continúa siendo un espacio de inseguridad. (Foto El Heraldo)


Los moradores y propietarios de locales comerciales ubicados en los alrededores del Parque 12 de Noviembre, aseguran que pese a los controles policiales, los delincuentes siguen en la zona y haciendo de las suyas, especialmente con la posible venta de sustancias ilícitas sujetas a fiscalización.

Andrés Castillo, propietario de restaurante, indicó que la situación empeora cada vez, ya que los controles no ayudan a eliminar la presencia de individuos que lo único que buscan es vender su droga y consumirla en el área natural.

“Cuando se pasa por el interior del parque se puede detectar el olor a marihuana, esto pese a la presencia de policías que llegan de vez en cuando al sitio”, comentó.

Por otro lado, indicó que la circulación nocturna por dicho parque y sus alrededores es totalmente peligrosa. “Hay personas que se quedan en las esquinas buscando a las víctimas. Como propietarios de negocios siempre nos vamos con el temor de ser víctimas de robo, tanto personal como de los negocios”, aseguró.

E igual forma, Julio Alvarado, morador de la calle Juan B. Vela, comentó que la presencia de meretrices es el foco de inseguridad, ya que los “chulos” están por todo lado vigilándoles.

“Este es un temor permanente. Las autoridades creen que con hallar dos o tres gramos de droga ya van a eliminar la inseguridad. Somos los habitantes del lugar, los que sufrimos diariamente y debemos callarnos por temor a represalias”, manifestó.

Aseguró que hace más de 20 años, la prostitución solo se veía en la noche y madrugada, pero desde ese tiempo hacia la actualidad, las meretrices están en cada esquina, al igual que los ladrones y consumidores de sustancias.

Recordemos que hace más de un año, la Policía Nacional ubicó las “Carpas de Seguridad”, mismas que no han dado resultados, ya que los robos continúan en la zona, según los moradores, mismos que desde sus ventanas observan los hechos delictivos sin poder decir o hacer algo. (I)

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