Poderes ancestrales de la guayusa

Interculturalidad

El té es preparado más por las mujeres de la cultura indígena amazónica. (Foto El Heraldo)

Cada mañana, María Belén Morales prepara el té de guayusa, coloca la bebida en un termo y se lo lleva a la universidad. Le da energía y le permite cumplir con sus obligaciones diarias en la institución educativa y en el trabajo.

Hace un poco más de seis meses, María Belén visitó la comunidad de San Francisco, en Pastaza, y participó de los rituales indígenas de la zona. Ahí tomó por primera vez el té de guayusa.

El ritual empieza muy temprano, a las cuatro de la mañana. Las familias de la comunidad y los invitados se reúnen alrededor del fogón, preparan la bebida con hojas de guayusa, la toman mientras hablan de sus sueños, le buscan un significado, purifican el cuerpo y el alma.

Algunos beben varias tazas de té, hasta que regresan todo lo que tenían en el estómago, esta es la forma de limpiar el cuerpo, explica Antonio Nurinkias, shuar que acude al Puyo para comercializar sus productos, en el ‘mercado de los plátanos’.

Hasta allí llegan decenas de personas en busca de plátano, yuca, mayones, papa china, hojas de guayusa, entre otros alimentos que se comercializan en este espacio.

A ese lugar, va cada semana doña Marlene Pozo, quien mantiene un puesto en el Mercado La Merced. Cada domingo, a las 05:00, visita el ‘Mercado de los Plátanos’ y compra hojas de guayusa para comercializarlas en su puesto, durante la semana.

La mayor parte de sus clientes son turistas, unos nacionales y otros extranjeros, que buscan la guayusa para preparar su propio té, cuando regresan a casa, tras la visita que realizan al Puyo o a las comunidades indígenas cercanas.

En la semana logra vender dos o tres porciones de hojas de guayusa, cada una la comercializa en dos dólares. Y cada porción permite preparar el té para unos 30 días o más.

Cuando se adquiere las hojas de guayusa, solo se debe colocar en un lugar que se ventile adecuadamente para que se sequen poco a poco. El secreto es que a medida que se secan, adquieren un mejor aroma y al momento de preparar la infusión mejora el aroma y el sabor, según doña Marlene.

La mujer explica que por cada litro de agua se coloca tres o cuatro hojitas de guayusa. Se hierve el agua, se la retira del fuego y se coloca las hojas para la infusión. Si quiere un poco más concentrada, puede hervirse las hojas por unos cinco minutos. Luego se coloca limón y un poco de panela. (I)

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