Verano, cursos, talleres y diversión

Columnistas, Opinión

Colores, ruidos, sonrisas, miradas y apresuramientos para no llegar tarde, han provocado la gran diversidad de cursos y talleres vacacionales para los niños, niñas y adolescentes que entidades públicas, privadas y del tercer sector han ofertado en este verano 2025.

Arte, deportes, formación académica, gastronomía en todas sus sub disciplinas han sido visitadas por nuestros infantes que se encuentran en la etapa de vacaciones, lo cual no implica la ausencia de actividades y menos aún que el aprendizaje se detiene, todo lo contrario, según manifestó el filósofo francés JJ. Rousseau (1712 – 1778) “lo mas importante para los jóvenes, es saber perder el tiempo”, en referencia a la capacidad de sacarle el provecho necesario al tiempo libre, de descanso o hueco.

Es así que nuestro casco central de la ciudad de Ambato, los barrios, parroquias son testigos de este escenario diario en donde se encuentran las instalaciones de centros culturales, deportivos, o espacios de formación paralela y complementaria, lo que obliga también a la planificación y organización de las familias y padres realizando el acompañamiento de los infantes.

El verano esta en su pleno apogeo las cometas serpentean en nuestro cielo, ese juguete sensible realizado de elementos naturales o ya plastificados que requieren la paciencia, destreza motriz y buenos vientos para echar a volar la ilusión de que volamos también, uno de los juegos patrimoniales que en Ambato se los hace en las faldas del querido “Casigana”. Las cometas de papel y rabo de tela se resisten a morir, comparten cielo con las de fabricación plástica, ahora acompañadas de muchos drones también se los ve volar por distracción y diversión.

Que sea entonces esta generación de padres, autoridades y sociedad la que inicie un proceso de cambio cultural, frente a la lógica de la vieja racionalidad en donde la verticalidad, el poder y la exclusión eran los elementos para formar los niños. Debemos reconocer que estamos formando ahora, la generación que conducirá nuestra ambateñidad y provincia de Tungurahua de la segunda mitad de este siglo.

Muchos de estos cursos están llegando a su clausura, muchas experiencias se han tejido, lejos esta cuando reclamábamos por espacios o alternativas, ahora debemos aplicar esa gestión cultural cuyo mejor método es la gestión creativa. A la vuelta de la esquina esperan las aulas, felicitaciones padres – manager del tiempo de sus hijos. (O)

fapava17@gmail.com

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