Mundo sin contaminación

Múltiples son los organismos y empresas que se han dedicado a reciclar y dar una nueva oportunidad a desechos, evitando así mayor contaminación.
Entre ello, está el conocido compostaje, ya que más de la mitad de los residuos que son generados dentro de una familia sirven para ser tratados como abono orgánico.
Legny Vivas, fundadora de ‘Agrovivas’, una empresa quiteña que trabaja con 35 barrios de 500 familias que composta 30 toneladas de residuos al mes, dejando así un tratamiento a más del 95% de la basura.
Este proyecto fue presentado en Ambato, con el único objetivo de incentivar a los ciudadanos a ser parte del cambio, dando tratamiento a residuos orgánicos.
“El compostaje nos ayuda a convertir en un abono que puede ayudar de gran manera a nuestras plantas y jardines. El principal gas de efecto invernadero es el gas metano, ya que acelera el calentamiento global y los residuos orgánicos representan el 12% de emisiones”, dijo.
Por otro lado, está el proyecto de los moradores del barrio ‘El Madrigal’, que aplican la hidroponía, siendo otra forma de ayudar a reducir la contaminación del suelo.
Los vecinos están unidos para la implementación del proyecto con el desarrollo de alimentos nutritivos.
Hay que indicar que la hidroponía es un método de cultivo de plantas que no utilizan suelo, sino una solución acuosa con nutrientes esenciales para el desarrollo de la planta.
Los vecinos ya han cosechado varias verduras y legumbres, cuya producción es totalmente libre de químicos.
Por su parte, Marco Acosta, ingeniero químico y parte del ‘Grupo Acosta’, indicó que todos los proyectos son parte de la economía circular y responsable con la implementación y guías estandarizadas para que los municipios puedan implementar proyectos beneficiosos.
“La economía circular no solo se asocia con el reciclaje, ya que sobrepasa con una visión holística, tratando de eliminar el ingreso de recursos vírgenes al sistema productivo y minimizar la salida de pérdidas. Estamos acostumbrados a un flujo lineal de producción al sacar los productos, consumirlos y arrojarlos; pero, la economía circular no funciona así, ya que hace que los productos permanezcan por más tiempo en el mercado”, dijo. (I)