La guayaba: fruta local con múltiples usos

La guayaba, fruta de pulpa rosada o blanca y aroma intenso, se consolida como un producto con alto valor nutricional, usos variados en la cocina y la industria, y buena oferta en los mercados mayoristas y locales de Ambato.
Agricultores de la región reportan cosechas durante gran parte del año, con picos en determinados meses que la hacen accesible para consumidores y comerciantes.
Beneficios
La guayaba destaca por su aporte de vitaminas (especialmente vitamina C), fibra dietética, antioxidantes y minerales como potasio.
Estos nutrientes la relacionan con beneficios como refuerzo del sistema inmune, mejora de la digestión, aporte antioxidante que protege la piel y posible efecto positivo sobre el control del colesterol y la presión arterial.
Algunos análisis incluso la califican como “superfruta” por su densidad nutricional frente a otras frutas comunes.
Más allá de consumirse fresca, la guayaba tiene un uso gastronómico e industrial amplio:
Alimentos: jugos, batidos, mermeladas, bocadillos o ‘bocadillos’ (dulce de guayaba), pulpas congeladas y sorbetes.
Productos procesados: concentrados, conservas y pulpas para la industria de jugos y repostería.
En sus usos tradicionales y medicinales se prepara en infusiones con hojas de guayaba para problemas digestivos y uso popular de la fruta por sus propiedades astringentes y antiespasmódicas.
En algunos contextos la cáscara o extractos también se usan en cosmética casera o como tinte natural (uso más puntual).
Ambato es uno de los principales puntos donde se distribuyen frutas a escala mayorista y en sus listas aparecen ventas de esta fruta.
Además, los mercados locales, ferias campesinas y puestos del Mercado Mayorista son los lugares más comunes para encontrar guayaba fresca, pulpa y conservas.
Estudios y diagnósticos realizados en la región indican que la guayaba puede producir durante casi todo el año en áreas de Tungurahua y provincias aledañas, con concentración de cosecha en meses específicos, por ejemplo, en algunos cantones el mayor volumen se registra entre octubre y enero.
La presencia de guayabo tanto como cultivo manejado como de “guayaba silvestre” en huertos familiares hace que la oferta sea relativamente constante, aunque con variaciones estacionales en precio y volumen. (I)
