Apoyo emocional en emergencia

Los primeros auxilios psicológicos, son una forma de ayuda emocional que se brinda a una persona justo después de vivir una situación difícil o traumática, como lo es un accidente, un desastre natural o una pérdida personal.
Su objetivo principal es calmar a la persona, hacerla sentir segura y apoyada, y ayudarla a enfrentar lo que está viviendo en ese momento. No reemplazan una terapia, pero son un primer paso para cuidar la salud mental en momentos de crisis y angustia extrema.
Es importante que todas las personas tengan conocimientos básicos sobre primeros auxilios psicológicos, porque nunca sabemos cuándo estaremos cerca de alguien que atraviesa un momento no previsto extremadamente difícil, como un intento de suicidio, por ejemplo.
En esos momentos, la reacción inmediata puede marcar una gran diferencia. Saber cómo acercarse con respeto, escuchar sin juzgar y brindar apoyo emocional puede ayudar a la persona a sentirse más segura y menos sola, lo que reduce el impacto del evento traumático. Además, una intervención adecuada puede prevenir que la situación empeore, evitar reacciones impulsivas y/o peligrosas, y facilitar que la persona acepte ayuda profesional si la necesita.
No se trata de ser psicólogos, sino de ofrecer contención básica, como se haría con primeros auxilios físicos.
En casos como un intento de suicidio, una respuesta empática y oportuna puede incluso salvar vidas. También ayuda a quienes brindan la ayuda a sentirse más preparados y menos impotentes ante situaciones difíciles. Por eso, enseñar primeros auxilios psicológicos a la población en general, es una herramienta poderosa para fortalecer la salud mental comunitaria y fomentar una sociedad más empática, solidaria y resiliente frente a la adversidad.
Para aplicar primeros auxilios psicológicos, acércate con calma y respeto, escucha sin juzgar, transmite seguridad y apoyo. no presiones para que hable, solo acompaña.
Ayuda a cubrir necesidades básicas y, si es necesario, busca apoyo profesional. Lo más importante es que la persona no se sienta sola en la crisis.
En conclusión, conocer y aplicar primeros auxilios psicológicos, permite brindar un apoyo inmediato, humano y seguro a personas que atraviesan situaciones difíciles. No se necesita ser experto, solo tener la disposición de ayudar con empatía y calma, lo que puede marcar una gran diferencia en el bienestar de quien sufre. (O)