De la devoción al horror
Fiesta de Capitanes termina en tragedia; un joven de 27 años muere apuñalado en el corazón tras una riña en el caserío San Juan.
La fe y el jolgorio se encontraron con la muerte en una noche que debía ser de celebración. El caserío San Juan, en el cantón Tisaleo, se vestía de fiesta en honor a Santa Lucía. La música, el baile y la tradición se mezclaban con el licor, invitados por los «capitanes» de la festividad, hasta que la madrugada irrumpió con una violencia incomprensible.
Alrededor de la 01:30 horas del domingo 14 de diciembre, la alegría se quebró en el Barrio La Merced. En medio de la multitud, se desató un altercado repentino que tuvo un desenlace fatal. La víctima fue identificada como Félix Rubén C., de 27 años. Testigos relatan que el joven fue atacado por una pareja: un hombre, presuntamente un pariente (Primo), identificado más tarde como Daniel C., de 26 años, y una mujer cuya identidad se mantiene bajo reserva.
Félix recibió una herida cortopunzante mortal que impactó directamente en el tórax. La cuchillada, de una furia demoledora, habría perforado órganos vitales como el pulmón y el corazón, provocando una hemorragia imparable. Fue trasladado de urgencia al Hospital General ocente Ambato, pero todos los esfuerzos fueron en vano. Minutos después, su fallecimiento fue confirmado.
El sector se convirtió en un hervidero policial. Personal de Criminalística y DINASED, bajo la dirección de la Fiscalía, acudió para el levantamiento del cadáver y el inicio de una búsqueda implacable. Las primeras pistas apuntaron rápidamente a Daniel C., el presunto agresor, pero las unidades que se dirigieron a su domicilio en Tisaleo solo encontraron el vacío: el sospechoso se había esfumado. (I)
