La confianza, el mejor activo de nuestro profesionalismo

En un mundo donde existe algunos “vivarachos” y se ve la presencia de aquellas personas que estafan, intimidan, aplican todo a la fuerza, mienten o engañan, surge un segmento de profesionales que basa sus negocios en el mejor activo que deriva de su formación y que se llama CONFIANZA.
Es verdad, actualmente los negocios empiezan a mejorar de manera paulatina y eso esperamos ocurra en todo el Ecuador, muchos empresarios continúan apostándole al país, ahora que el riesgo de invertir en nuestra nación se redujo a menos de 800 puntos (una cifra record), que la confianza en el poder legislativo ha mejorado y que gozamos del aval de varias multilaterales (FMI, BM, BID).
Escucho a varias personas hablar, “me voy donde el doctor tal, porque me da confianza y me inspira, cada palabra suya es motivante y además es muy honesto”; este principio se aplica también en otras profesiones, por ejemplo en la construcción donde algunos profesionales aplican valores muy diferenciados por el metro cuadrado o con servicios de restaurante, turismo, etc.
Si adquirimos productos agrícolas, algunos comerciantes enfatizan que estos son “orgánicos”, pero inmediatamente nos preguntamos será verdad? o utilizan este mecanismo para aumentar sus ventas; hablar con sinceridad es una herramienta válida en el mundo empresarial, de esa manera dejamos un buen precedente para futuras negociaciones y tenemos la certeza de que los resultados serán satisfactorios.
Un refrán estipula “el producto atrae, la persona convence” y es muy cierto, nos ha pasado a los vendedores o aquellas personas que atendemos a clientes, cuando nos dicen, “verá no conozco mucho del producto pero si usted me garantiza su utilidad, indudablemente lo voy a adquirir”; la pregunta que nos hacemos es, cómo ganar la confianza en los negocios que realizamos, la respuesta es muy simple, diciendo siempre la verdad.
Diga con honestidad el tiempo de duración del producto, indique si en realidad tiene o no garantía, manifieste el uso del bien sin exagerar sus atributos, el precio real es fundamental; no tenga temor a la competencia, recuerde que pueden copiar nuestro producto, pero nunca nuestra forma de ser; le reto a evaluar aquí en la localidad (provincia de Tungurahua) cuantas personas gozan de su credibilidad, ya sea en el ámbito empresarial, deportivo, social, periodístico, político, dese cuenta realmente cuantos gozan de su confianza y, pregunte si “usted mismo es confiable” en las actividades que realiza diariamente. (O)