Muerte materno infantil, sombra que persiste
El anuncio de la creación del Comité Interinstitucional de Salud Materno Neonatal genera expectativas y la esperanza de seguir sumando esfuerzos para bajar los índices de mortalidad materna y neonatal en el país. Los hospitales regentados por el Ministerio de Salud Pública (MSP) e Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) cuentan con el Servicio de Neonatología.
“La mortalidad neonatal no solo es preocupación del país. La prevención y reducción de la muerte materno neonatal tiene base en la tecnología. Los países que tienen mejor tecnología son los que tienen mejores resultados”, expresa el jefe del Servicio de Neonatología del Hospital General Docente Ambato, Reinaldo Carrillo.
Y explica, “que la mayor causa de muerte neonatal es la infección de los recién nacidos y se da debido a la inmadurez, porque son inmaduros a nivel pulmonar, cerebral, renal, digestivo y lo más importante es la inmadurez en el aspecto inmunológico. Cualquier tipo de infección en el prematuro puede ser catastrófico”.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) señala que entre 2016 y 2030, como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), el propósito es reducir la tasa global de mortalidad materna a menos de 70 por cada 100.000 nacidos vivos.
Mientras que, en Ecuador, la muerte neonatal registró en 2023 una tasa de 5,8 por cada 1 000 nacidos vivos; mientras que, en 2022 hubo 6,7 de muertes de 1 000 recién nacidos en sus primeros 28 días de vida. Si bien hay ligera reducción de mortalidad materna entre estos años, las autoridades ecuatorianas consideran prioridad reducir más estos niveles. (Ecuavisa).
“Gracias a Dios y a los profesionales que trabajan en el servicio de Neonatología tenemos tasa de mortalidad de 4 recién nacidos por cada 1 000 niños que nacen aquí”, resalta Reinaldo Carrillo del Hospital General Docente Ambato.
El exministro de Salud Pública y actual presidente del Consejo directivo del IESS, Edgar Lama, destacó la importancia del despliegue más eficiente de profesionales, ambulancias, medicamentos y otros factores que contribuyan al Sistema Nacional de Salud.
El jefe del Servicio de Neonatología aseveró que “faltan muchas cosas. No tenemos cardio pediatra, neurólogo pediatra y existen obstáculos para el manejo de los pacientes que van a necesitar la valoración de los profesionales con estas subespecialidades”.
Reconoció que la falta de profesionales en las subespecialidades y los pocos existentes se encuentran en el sector privado o se quedan en Quito, Guayaquil, Cuenca. Otra observación tiene relación con el personal de enfermería, siendo necesario que desde la academia haya la preparación especializada. A nivel de la casa de salud, dijo que van reforzando las capacidades mediante varias prácticas, charlas, conferencias. A eso se suma, inconvenientes en el traslado de pacientes neonatos, debido a la falta de equipamiento adecuado de las ambulancias.
El Hospital General Docente Ambato cuenta con cuatro médicos especializados en neonatología; cinco médicos pediatras; 40 profesionales en enfermería que laboran en turnos rotativos. Además, la capacidad del Servicio de Neonatología es 43 camas, 9 en cuidados intensivos, 13 cuidados intermedios y 20 cuidados básicos (Plan Canguro).
Mientras que, el Hospital General del Seguro Social cuenta con capacidad de 22 camas de las cuales 6 destinadas a cuidados intensivos, 8 a cuidados intermedios, 2 a aislamiento, 6 a alojamiento conjunto y 1 consultorio para control posthospitalización.
Según información del IESS, “para el 2013 cuando se apertura la unidad. El hospital no contaba con médicos subespecialistas en neonatología, por lo que amparados en el acuerdo ministerial 1849 inició el servicio con médicos con experiencia en manejo del paciente neonatal”. Al momento existen cuatro médicos pediatras.
En el Comité Interinstitucional tendrán voz y de voto delegados del Ministerio de Salud Pública, del IESS, la Policía Nacional, las Fuerzas Armadas, la Agencia de la Calidad y Medicina Prepagada (ACESS), y representantes de la academia, sociedades científicas, sociedad civil, investigadores, y organizaciones nacionales e internacionales con enfoque de salud materna neonatal. (I)
