BOLIVAR, EL POLITICO VISIONARIO / John Tello Jara

Columnistas, Opinión

A más de constituirse como un estratega militar y junto a patriotas de diversa nacionalidad declarar la libertad de cinco naciones sudamericanas, Simón Bolívar fue un político visionario; talvez desconoció el concepto básico de la economía “satisfacer las necesidades ilimitadas con bienes escasos”, pero conocía que al conformar un bloque sólido como la Gran Colombia podría enfrentar avatares económicos y militares.

Imaginemos un solo banco central, el de la Gran Colombia, en donde circule una moneda local que pudo haberse llamado “bolívar”, cuya emisión se hubiese basado en la producción del bloque, podemos imaginarnos todas las bondades naturales, turísticas, mineras, agrícolas, industriales y demás de la región que podrían fortalecer la moneda.

Lamentablemente con una moneda, revalorizada como el dólar,  trae problemas con nuestras exportaciones al encarecerlas, mientras que Colombia con un peso devaluado tiene problemas internos inflacionarios, si bien se fortalece el turismo y las exportaciones, una devaluación genera inestabilidad.

Otros mercados son productivos (mayor cantidad de productos por unidad de tiempo con reducción de costos), estos podrían ingresar al Ecuador con precios bajos a través de acuerdos comerciales, lo cual traería liquidación de pequeñas y medianas empresas de estos sectores; pero al encontrarnos unidos hubiésemos aprovechado el uso de materias primas, la movilización de mano de obra calificada y mayor apertura al consumo de nuestros propios productos.

Esta reflexión, debe motivar a pequeños empresarios a tratar de establecer alianzas estratégicas entre sí, con el objeto de unir capitales y agrandar su unidad productora, es decir que si tenemos dos empresarios que se dedican a producir por ejemplo calzado, el uno tiene USD 30.000 y el otro cuenta con USD 25.000 al formar la nueva empresa tendrían 54,54% y 45,45% de acciones respectivamente e ingresarían ganando en la compra de materia prima, ya que el pedido en mayor escala implica una reducción en el costo de adquisición, además podríamos ampliar los mercados ya que ofertaríamos precios módicos a más clientes, los conocimientos adquiridos serían transmitidos a la nueva empresa y por supuesto la utilidad sería beneficiosa para las partes.

Si este ejercicio lo realizamos con mayor número de empresas, de diversos sectores, el resultado sería optimo y cumpliríamos un sueño de Bolívar, formar alianzas para enfrentar a la competencia.

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