Ventas bajaron significativamente
Pirotecnia se utilizaba en Fin de Año. (Foto El Heraldo)
La costumbre de despedir el año con luces de colores y el monigote se suspendió en lugares públicos. Esta decisión es riesgosa, porque la gente querrá quemar sus monigotes en casa y se pueden generarse incendios, según Christian González, gerente de Gloapsa, empresa autorizada para la distribución de pirotecnia.
“Pocas personas vienen, porque consideran necesario comprar este producto. Este podría ser el fin de artesanos dedicados a la venta de monigotes y quienes nos dedicamos a la venta de pirotecnia. Nosotros hicimos una inversión significativa en cumplir lo que nos pide la ley”, agregó.
Esta empresa funciona con una cadena de comerciantes que al momento se han quedado sin empleo. Son comerciantes temporales que en diciembre venden estos artículos.
Riobamba hacía su feria en La Dolorosa. “Siempre coordinábamos con autoridades en un sector abierto para que 100 comerciantes se dediquen a vender y teníamos una cadena segura de comercialización, eso ya no existe. Otro fuerte era Ibarra que se hacía la feria en un sector establecido. Al momento la única feria permitida es la de Pelileo”, agregó.
Sergio Tubón, director de la Institución Autónoma Cuerpo de Bomberos de Pelileo, habló sobre la feria que se desarrolla en El Corte.
“Los controles se realizan con diferentes autoridades de Pelileo, en este caso: Comisaría, Policía Nacional, Intendencia, Militares y Cuerpo de Bomberos. Hicimos allanamientos y retiros. En el sector de El Corte están con los permisos correspondientes para la venta de pirotecnia, no pueden vender productos de fabricación artesanal”, destacó.
La disminución en las ventas también se ha generado en años anteriores ante la oposición de grupos animalistas que ha frenado bastante el consumo. Sin embargo, la idea de importar con las debidas normas ha permitido que disminuyan los accidentes y mutilaciones por el uso de pirotecnia artificial, según González. (I)
