LA INMADUREZ EMOCIONAL EN LOS ADULTOS… / Aracely Silva Cadmen

Columnistas, Opinión

La madurez se alcanza cuando una persona es capaz de ser autónoma, es responsable y tiene cierta estabilidad en su vida; esto, en muchas ocasiones, no tiene nada que ver con la edad.

Una persona con inmadurez emocional puede hacer daño a los demás independientemente de si nos importa o no, solo porque creen que alguna causa lo justifica, o porque a ellos les hicieron daño en el pasado, y no es consciente del perjuicio y de las consecuencias de sus acciones.

Es indudable que existen muchas personas con una marcada predisposición a actuar de un modo impulsivo, sin tener en cuenta las consecuencias de sus actos, y es lógico que a esas conductas las acompañe un estado de ánimo inestable; una persona que es inmadura emocionalmente, tiene miedo  a los compromisos de toda índole,  son incapaces  de expresar lo  que sienten o incluso que pasan de la risa al llanto en cuestión de minutos,  jamás aceptan que cometieron el error, no suelen disculparse, no tienen proyectos a largo plazo, son personas que tratan de desquitarse todo lo que les pasó con  personas que no ocasionaron el daño.

Si crees que tienes inmadurez emocional y decides ponerle fin, quizás estés empezando a madurar, estás aceptando que tienes un problema y, además, estás siendo responsable e intentando ponerle solución, empieza por resolver los problemas que tengas, deja de lado los pensamientos negativos e irracionales, fortalece tu autoestima y establece metas en tu vida.

Es importante recordar que en una relación feliz debe existir un nivel adecuado de equilibrio entre el dar y el recibir. Una persona inmadura suele exigir y esperar más de lo que da, no es conveniente caer en esta trampa, recuerda tener siempre equilibrio.

Una persona puede tomar la decisión de pedir ayuda profesional para tratar su inmadurez emocional al observar las consecuencias que su actitud produce en su propia vida.No obstante, lo más importante es que la personaaprenda a quererse y a valorarse por lo que es.

 Lograr una madurez afectiva puede ayudar a crear una mejor estabilidad en el amor, cualidad que es esencial para la estabilidad en las relaciones afectivas y para lograr armonía y una mejor calidad de convivencia familiar.

“La madurez es cuando tu mundo se abre y te das cuenta de que no eres el centro de él”.

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