La agricultura ancestral se mantiene en Las Carmelitas

Interculturalidad

 
Cuando la producción está lista para la cosecha el trabajo inicia temprano. (Foto El Heraldo)

María Juana Romero (77) es una mujer que conoce de la agricultura ancestral y lo demuestra con la cosecha de papas. La señora que reside en el barrio Las Carmelitas de Santa Rosa ha dedicado su vida a la siembra de diferentes productos. El trabajo realiza en compañía de familiares y peones. Cuenta que las instrucciones de sus padres siguen siendo la guía por la posición y tamaño de la luna.

“Primero igualamos el terreno, después viene el abono orgánico, posteriormente compramos la semilla y sembramos”, comenta la septuagenaria.

Agrega que la siembra de papas si tiene influencia de la posición de la luna, pero que actualmente decide cultivar en cualquier momento, pero tomando en cuenta los cuidados para que no se pegue el tizón. “El maíz si es en fecha exacta, caso contario solo salen hojas”, explica.

Sus hijas y peones le ayudan en la actividad. A un costado de la vía principal del barrio tiene cerca de 15 quintales. Con azadón siguen buscando más papas. “Siempre se hace la reunión familiar para cavar y cosechar, no sabemos el precio que está, pero lo más importante es no dejar morir la agricultura”, dice una hija de María Romero.

Los peones en el sector por la ayuda reciben 15 dólares más desayuno, almuerzo y merienda. “Son bien atendidos”, finaliza la agricultora, entre risas. (I)

 

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