Falleció Luis Torres Carrasco

Titulares
Su última frase célebre fue: “La vida es un instante de felicidad”. (Foto El Heraldo)

Nuestro Director y fundador de El Heraldo falleció ayer, a la edad de 92 años. En 1958 fundó el Periódico, con otros distinguidos ciudadanos ambateños y la Diócesis. Ejerció las funciones de Gerente hasta 1975, en que asumió, además, la Dirección. El último viernes escribió su editorial final en la página principal. Todos los días, en los últimos 62 años, supervisó el funcionamiento de El Heraldo. Escribió más de ocho mil editoriales, presentando la posición oficial del Periódico sobre temas locales y nacionales.

Fue alcalde de Ambato, entre 1970 y 1974. Fue también diputado por Tungurahua entre 1968 y 1970, además de constituyente alterno en 1967. Presidió el Tribunal Electoral en 1960. Como Alcalde impulsó la pavimentación del centro de Ambato y la ampliación de la Avenida Cevallos. Como Diputado fue el proponente de la Ley de creación de la UTA.

Desempeñó las funciones de Registrador de la Propiedad de Ambato en dos períodos, 1975-1982 y 1998-2011. Abrió su Estudio Jurídico en 1957 y ejerció libremente la profesión.

Nació el 9 de enero de 1927. Estudio en la Escuela México y en el Colegio Bolívar. También se preparó en el Seminario San Luis, donde aprendió, en su adolescencia, Latin, Griego y Francés. Se graduó de doctor en jurisprudencia en la Universidad Católica. Recibió, además, la titulación de periodista por su experiencia. Fue un inte-lectual de gran cultura, con amplias lecturas y reflexiones profundas.

Entre sus más importantes alocuciones se encuentra el discurso que pronunció en Santiago de Chile, en 1973, cuando entregó el Busto de Montalvo para que sea ubicado en un espacio público de la capital chilena.
Estuvo muy vinculado al campo y su finca de Miñarica en Santa Rosa. Fue un ferviente hincha del equipo Macará y un católico practicante ejemplar.

El Heraldo fue su pasión, su familia fue su amor eterno y Ambato fue su núcleo vital. Se destacó en lo intelectual, en lo empresarial, en lo profesional y en lo político, con nivele de excelencia en cada ámbito.

El Heraldo fue su pasión, su familia fue su amor eterno y Ambato fue su núcleo vital. Se destacó en lo intelectual, en lo empresarial, en lo profesional y en lo político, con niveles de excelencia en cada ámbito.

Estuvo casado con la distinguida dama ambateña, Bettyna Torres Castro, su compañera de ruta durante 58 años de feliz matrimonio, en los que tuvieron cuatro hijos, Luis Fernando, Mónica Paulina, Carlos Mauricio y Bettyna Elizabeth. (I)

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