El Ecuador que debemos conocer: El Cerro Santa Ana / Luis Alfredo Silva Zambrano

Columnistas, Opinión

Hace algún tiempo atrás, estuvimos en El Cerro Santa Ana; uno de los atractivos turísticos, que posee la hermosa ciudad de Guayaquil. Se encuentra al noreste de la urbe, cerca de La Plaza Colón, ubicada en el barrio Las Peñas, junto a La Iglesia de Santo Domingo, a La Plaza y Museo de los Bomberos y a El Río Guayas.

La regeneración urbana del Cerro Santa Ana, abarca unas 14 hectáreas; comenzando en las escalinatas, denominadas Diego Noboa y Arteta; para culminar, en La Plaza Mirador El Fortín, pasando por los callejones, llamados, Las Carabelas, Los Astilleros, El Galeón, Las Cruces, Las Cuevas, El Tesoro y Las Animas; nombres que recuerdan, la época legendaria, de La Ciudad de Guayaquil.

Al ascender las escalinatas, no tiene la necesidad de contarlas, porque se encuentran numeradas. Al comenzar, están divididas en dos partes, para subir y bajar, siempre tomando la derecha, para la facilidad de caminar.

Las casitas que existen, junto a las escalinatas y a los callejones, muestran una simpática arquitectura tradicional, y mucho colorido; se encuentran pintadas, con varios colores llamativos. Todo el entorno, se halla adornado, con atractivos postes ornamentales.

En los 310 metros del trayecto, desde el inicio, hasta la cumbre, existen una diversidad de servicios; en los locales comerciales se ofrecen: artesanías, camisetas, collares, adornos, artículos de cuero, entre otros; en las galerías de arte, se venden, impresionantes cuadros de pinturas, esculturas y antigüedades; en las operadoras de turismo, se dan informaciones sobre La Ciudad de Guayaquil; se expenden, libros, guías y postales; en los restaurantes, hay ricas comidas costeñas; y en los bares, se sirven, cervezas, gaseosas, jugos de frutas y varios licores.

En la cima del cerro; existe, una pequeña pero agradable capilla; La plaza Mirador, El Fortín, La Plaza de Los Honores. El Museo Abierto y El Faro. En el interior, de este último, se ha construido, unas gradas en forma de caracol, que llegan hasta el mirador, que da vuelta al Faro, permitiendo, contemplar· El Río Guayas, El Malecón 2.000, La Isla Santay, los puentes sobre los ríos Daule y Babahoyo, que originan El Guayas, y la maravillosa Ciudad de Guayaquil.

Así es El Cerro Santa Ana; un encantador atractivo turístico, donde se conjuga, el pasado con el presente.

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