Finanzas públicas exhaustas / Editorial
A los municipios se les estaría adeudando más de 300 millones de USD por parte del gobierno. Los sueldos de los funcionarios se pagan con retraso. Los proveedores exigen pagos en manifestaciones en la plataforma gubernamental.
No hay duda que los recursos públicos escasean. Tan desesperados deben estar en el gobierno que el Presidente ha decretado la recaudación anticipada del impuesto a la renta de las empresas que más facturaron durante la pandemia. Les van a obligar que paguen el 2020 lo que deberían pagar el 2021.
Los tenedores de bonos no muestran apertura suficiente para renegociar la deuda y, así, liberar pagos de intereses y capital. Los organismos multilaterales de crédito anuncian préstamos pero no los concretan en beneficio del Ecuador.
En los Gads de Tungurahua se sienten los efectos de la falta de transferencias y reembolsos del gobierno. Con unas finanzas públicas exhaustas no habrá recursos suficientes para obras ni para cubrir los gastos corrientes y, de ese modo, se deteriorará la economía. (O)
