Promueven riqueza a través de la danza

Interculturalidad
Las cholas cuencanas representadas por alegres niñas brillan con las prendas ancestrales. (Foto El Heraldo)

La Academia de Danza Carlos Quinde  y el Grupo Folclórico Tungurahua incentivan permanentes en niños y jóvenes el arte de la danza y el rescate de las tradiciones de los pueblos andinos. Los niños desde los cuatro años participan en los talleres tanto permanentes como vacacionales para rescatar la danza y ritmos de los antepasados.

Según Carlos Quinde, director del Grupo Tungurahua se busca incentivar en los niños el conocimiento de la danza  para que a futuro sean parte del arte.

En las épocas pasadas las mujeres de acuerdo al sector lucían variadas prendas de vestir donde resaltaba el colorido y diversidad de piezas para su vestuario.

El andarele un baile tradicional para animar las fiestas se conserva en Esmeraldas y por medio de talleres de danza en todo el país también continúa vigente.

Otro danza  es la Diablada  como parte de una fiesta popular que nació en la época de la colonia  española y que practican niños y adultos de acuerdo a la ocasión.

Las cayambeñas visten trajes típicos un centro, blusa de colores bordadas por ellas mismas, alpargatas y rebosos que son parte de su identidad.

La chola cuencana es la mujer campesina  de Cuenca, es una figura emblemática de la sociedad y su vestimenta colorida y sombrero constituyen su presentación, el traje típico es referente para las demostraciones de la danza folclórica. (I)

 

 

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